El Director de Concesiones de la provincia se refirió al tema Chapelco. Detalló el proyecto inmobiliario, la Ley 2388 y expresó, con respecto a las rucas de la base del Cerro, que la Comunidad Vera y Curruhuinca sabían que estaban construyendo “dentro de los límites”.

19 Jun 2017
    

El Director de Concesiones neuquino, Ricardo Pulella, conversó con Radio Fun y se refirió a la historia de los contratos mantenidos entre la provincia y el Centro de Esquí, a través de sus distintas administraciones.

Además, detalló la famosa Ley 2388, que transfería la potestad del Cerro y sus proyectos al Municipio, el proyecto inmobiliario de Nieves del Chapelco y la construcción de las rucas en el límite de la concesión.

Aseguró que “es un tema político” y que las acusaciones, realizadas en base a “infamias”, resultan “dolorosas”, por “todo lo que se ha hecho y se quiere seguir haciendo por Chapelco”. Además, destacó: “Estamos seguros de que lo que estamos haciendo, es para bien de San Martín de los Andes y de la provincia de Neuquén”.

 

Ley 2388: “A nadie, ni Concejales ni el Ejecutivo Municipal, le interesó seguir con esa ley adelante”

El Director de Concesiones de la provincia se refirió a la Ley 2388, que habla de la autorización a transferir la concesión del centro de esquí al Municipio, acción que finalmente no fue completada.

“El Concejo Deliberante en el año 2000, son suposiciones mías, viendo la bonanza que tenia Nieves del Chapelco con Capozzolo al frente, que venía muy bien, que había pagado muchas de las deudas que tenía la Cooperativa, propone a la provincia que se haga la transferencia al Municipio, no solo del contrato de concesión, sino de todas las tierras fiscales dentro de la concesión, todo el Lote69 A. La provincia acepta, se manda a legislatura un proyecto, pero en medio de esto, aparece la caída de la ley de convertibilidad”, detalló, conjugándose con el reclamo de las comunidades mapuches, reclamando territorios.

“La panacea que era el centro de esquí, se cayó”, aseguró Pulella, añadiendo que lo que ocurrió luego de esto, fue que “los concejales dejaron de tener interés en el Cerro porque volvía a la historia donde se tenía que endeudar para poder seguir adelante”.

Como, por ley nacional, “había que renegociar el contrato de concesiones, se le dio a la provincia”, y agregó: “A nadie, desde quien lo propuso, Concejales y Ejecutivo Municipal, le interesó seguir con esa ley adelante”.

“Estuve leyendo el libro de sesiones de cuando se aprobó la ley”, completó el Director: “Hay un diputado de Alianza que dice claramente a sus colegas, tengamos presente que estamos autorizando a transferir las tierras, no estamos obligando. Es la clave. Hay una autorización, no una obligación a transferir. Los interesados de que se haga, ni siquiera fueron a defenderla. Quedó en el olvido. Pasaron trece años y la vienen a reflotar ahora. Incluso, la ley tenía un plazo hasta el 2003, tampoco se hizo, por lo cual es prácticamente inocua. Digamos que del año 2002 que se sancionó la ley hasta ahora, se hicieron muchos actos administrativos dentro del Centro de Esquí. Esto quiere decir que si la ley estuviera vigente, todos ellos se hubieran caído, igual que los acuerdos, el convenio con los mapuches, la transferencia de Capozzolo a Adrogué…  ¿Qué situación jurídica quedaría?”

“La realidad es que es todo tirado de los pelos”, expresó el funcionario: “Es una movida tan política que perjudica a todos los que queremos que crezca el Centro de Esquí”, y concluyó: “No tenemos que olvidar que hace cinco, seis años, con quienes gestionan ahora Nieves del Chapelco, pasaron los esquiadores de 2 mil a 6 mil. Eso trae gente a San Martín de los Andes, y hace que el Centro sea el mejor del país”.

Las Rucas y el límite de concesión

“Yo no entiendo cómo la gente puede ignorar las cosas”, arrojó Pulella, en relación a si las rucas están, o no, en el límite de concesión del Cerro Chapelco, y aseguró: “La licitación salió con objeto muy claro, la explotación del centro de esquí y la asignación de tierras en venta para sentido inmobiliario. Era una obligación hacerlo, porque no había camas suficientes en la ciudad para albergar posibles esquiadores. Todo eso se hacía en el Lote 69 A, cuyos límites los conoce la Comunidad Vera y Curruhuinca”.

Según detalló, lo dice legislación del 87 y el contrato de adjudicación: “El Complejo del Cerro está en el lote 69 A, y las rucas están ahí también”.

El Director de Concesiones además comentó que “cuando se iniciaron las construcciones les comunicamos a todos los rental que estaban construyendo dentro de la concesión e hicieron caso omiso y continuaron con la obra”.

“Tenemos la obligación jurídica de respetar los contratos de concesión”

Pulella fue certero: “Todo esto del contrato de provincia con un privado no es de ahora, viene del 87, es cómo pensaban en esa época y nosotros tenemos la obligación jurídica de respetar los contratos de concesión. No podemos hacer otra cosa”.

En relación a esto, detalló cómo fueron creciendo las hectáreas afectadas al Centro de Esquí: “Las tierras nunca dejaron de estar en el tapete, al contrario, incluso lo estuvieron en el 97, con la Cooperativa que estaba a cargo, que representaba a la comunidad de San Martín de los Andes”, detalló Pulella, indicando que en ese entonces, fue la misma Cooperativa, cuando precisó salir a buscar quien invirtiera para poder salir a flote, que solicitó pasar de 15 a 30 hectáreas, “porque no era atractivo para los inversores”

“Por suerte encontraron a Enrique Capozzolo. Fueron tres años de bonanza hasta el 2000, hasta que la Cooperativa decidió que él podía trabajar solo, le pide a la provincia que autorice a trasladar el contrato de concesión a la empresa, pero con la condición de pasar de 30 a 50 hectáreas, porque también en ese momento no eran rentables las 30. Se aceptó. Lo propuso la Cooperativa, representada por la comunidad, y provincia aceptó. Así se siguió, hasta que en seguida empezaron los problemas grandes, la salida de la convertibilidad, Capozzolo, pasó de Rey a mendigo, tuvo un problema grave económico en todas sus empresas, eso se vio reflejado aquí, al mismo tiempo arrancaron los inconvenientes con los mapuches, que reclamaban tierras originarias hace mucho tiempo y había que otorgarlas", completó.

Sobre el “Proyecto Inmobiliario”

De acuerdo a Pulella, el Proyecto Inobiliario del Centro de Esquí “está estipulado desde el 87”; y detalló: “Una vez que Nieves del Chapelco completó todas las inversiones, como hizo en su conducción actual, tenían derecho a pedir tierras, por la Ley 378, prometidas dentro de objeto del contrato”.

El Director manifestó que la Empresa “tenía que presentar el ante-proyecto de desarrollo inmobiliario”, el cual fue analizado y aprobado, y destacó: “En la misma licitación, dice que después de nosotros aprobar, viene la Dirección de Bosques a dictaminar cómo hacer ese desarrollo, para generar el menor impacto posible”, algo que todavía, por los hechos que se suscitaron, no logró avanzar.

Al referirse al lugar de dicho desarrollo, y al decreto 505 del año 2010, indicó que el mismo “se hizo con intención de que quede clara la renuncia expresa de la Empresa a construir en las 50 hectáreas de la base, porque estaban comprometidas, desde 2008, a la Comunidad Vera”.

“Tuvimos que negociar dónde se hacía”, continuó, indicando de todas formas que “no podíamos dejarlo (a Nieves del Chapelco) sin desarrollo, porque era el objeto de la licitación”, motivo por el cual “se buscó la forma de hacerlo a continuación de Las Pendientes”.

Sobre esto, amplió: “Nos pedían 300 hectáreas, dijimos que no, y terminamos la negociación dándole 40 h, además de las 50 que tenían, por compensación de zona”, describiendo que entre la base y el lugar asignado en la cota alta “son dos mundos distintos”, carentes de servicios, caminos, entre otros puntos. “Creo q negociamos muy bien para la provincia y San Martín de los Andes”, dijo Pulella.

“Había un largo camino por recorrer”, finalizó, reiterando que el ante proyecto “debía ir a la Dirección de Bosques”, y luego al Concejo Deliberante, “para establecer si los codificadores urbanos son adecuados”.

Además, para concluir, enfatizó que no es cierto el ocultamiento del Decreto 505/10, ya que el mismo “está publicado”, y, por otro lado, aseguró: “Cuando se hizo la renegociación favorable a la provincia, no existía  la Ley de Bosques. Ahora lo que pide la Empresa es que se recategorice esa zona para hacer el desarrollo inmobiliario en las condiciones ambientales que se permiten”.