Fernando Bravo habló de un deterioro del Estado, que acumula más de 20 años, llamó al Municipio a “repensar su administración” y a “tomar otras decisiones” para afrontar las diversas problemáticas actuales, como el estado de las calles y dónde disponer la basura, dejando de lado las “mezquindades políticas” y “trabajando en serio para hacer de pueblo otra cosa”.

18 Jul 2018
    

El Defensor del Pueblo, Fernando Bravo, se refirió a la grave situación en la que se encuentran las calles de todo el ejido y a la problemática en la disposición de la basura, dos de las más urgentes situaciones con la que se encuentra lidiando actualmente el Ejecutivo Municipal.

Por un lado, en cuanto al estado de las arterias principales, calles internas y accesos, recordó compromisos asumidos meses atrás por funcionarios municipales, luego de un informe pormenorizado presentado por la Defensoría, enfatizando en “la responsabilidad política” de los miembros tanto de esta gestión como de las anteriores, “que prometieron algo y no lo hicieron”, para llegar al escenario actual.

“Pasaron 20 años de deterioro del Estado”, señaló el Defensor: “Tenés un problema estructural, no coyuntural. Tenés que barajar y dar de nuevo, repensar la administración que tenés. Si pasaron veinte años tomando las mismas decisiones y equivocando resultados, alguna cosa hay que cambiar”.

Sobre la nota que los vecinos presentarán este jueves ante la Defensoría, tras juntar firmas en distintos puntos de la ciudad, denunciando el estado en el que se encuentran los caminos, indicó que se les explicará lo realizado hasta ahora, así como “los límites de la actuación”, ya que “no se puede judicializar cada pozo de la ciudad”, aunque sugirió que podría articularse un encuentro con los funcionarios para comprometer una respuesta.

Bravo habló de “responsabilidad política”, enfatizando que “el funcionario público es responsable de lo que hace o lo que deja de hacer, independientemente de lo que diga la norma, y así lo es de cara a la sociedad”. En este sentido sugirió al Municipio buscar la colaboración de las distintas fuerzas políticas, aunque eso represente admitir una “debilidad como Gobierno”, para poner toda la inteligencia disponible a funcionar.

Seguidamente y en relación a la problemática de la basura, apuntando al Ejecutivo y también al Legislativo, cuestionó: “La Defensoría fue convocada a trabajar en el Marco Regulatorio en el tema del relleno sanitario y pusimos como condición que no se hable más de ninguna empresa en particular. Estábamos urgidos por este Marco después de la Audiencia, pero esta semana, luego del receso del Deliberante, no nos llamaron más, entonces… ¿cuál es la urgencia? ¿Cuál es la responsabilidad política y el deseo de todas las fuerzas a buscar soluciones? Lo que veo es que estamos repitiendo en los últimos años los mismos errores y cada vez nos va peor, entonces tenemos que tomar otras decisiones”.

En este mismo sentido añadió que, mes a mes, “la contribución de los vecinos va cayendo” y que si bien coincide con la temporada baja, también responde a que los contribuyentes agotaron su paciencia al no ver una contraprestación a lo abonado en sus impuestos, y continuó: “El Municipio necesita todos los meses pedirle plata a la Provincia para pagar los sueldos, ¿no será hora de buscar además de eso otros instrumentos de ingreso de dinero a las Arcas? ¿De explorar otras posibilidades? ¿No será hora de pensar en la coparticipación, en comprar máquinas con esa diferencia y de trabajar en serio para que la gente vea lo que se está haciendo y empezar, con el tiempo, a recaudar cada vez más?”.

“Vamos a mostrarle a los vecinos que no importa si nos vamos después de cuatro años, que no importa quién venga después, o quién estuvo antes y trabajemos para hacer de este pueblo otra cosa”, arrojó Bravo y concluyó: “Hasta que no asumamos eso y nos dejemos de pelotudear con mezquindades políticas, nos va a seguir yendo igual”.