Si bien aún la sentencia no se encuentra firme y el imputado está cumpliendo reclusión domiciliaria, la Fiscalía solicitó la prisión preventiva, que se evaluará este miércoles en una nueva Audiencia.

15 Ago 2018
    

Ayer por la mañana, en la sede local de la Oficina Judicial, se llevó a cabo la audiencia de Cesura en la causa por “Abuso Sexual, Lesiones Leves, Amenazas y Daño” que fue denunciada y conocida públicamente en el mes de enero en nuestra ciudad, en la que un hombre fue acusado de golpear y abusar de su ex pareja a la vera de la ruta 48, frente a sus dos hijos.

El imputado, que había sido hallado responsable del hecho en la primera etapa del juicio realizado los días 26, 27 y 28 de junio, fue condenado a una pena de 8 años de prisión, pese a que la Fiscalía había solicitado 12.

Con la participación de los Doctores Etcheto, Felau y Rodríguez Gómez, se determinó la pena que deberá efectivizar el imputado, quien hasta la fecha se encuentra cumpliendo reclusión domiciliaria. La Fiscalía, representada por Inés Jerez, solicitará una modificación en este punto durante la jornada de hoy, con el objetivo de pasar a la modalidad de prisión preventiva.

La pesadilla

Todo ocurrió durante la madrugada del 3 de enero, cuando una mujer de nuestra ciudad fue amenazada, golpeada y abusada carnalmente a la vera de la ruta 48, frente a sus hijos de 5 y 10 años.

La víctima, que estaba separada de su marido, había decidido subirse a su propio vehículo a altas horas de la noche para buscar a sus pequeños, que estaban con su padre cumpliendo un régimen de visitas en la zona de Yuco, luego de percibirlo en estado de ebriedad en una comunicación telefónica.

Fue en el trayecto que se cruzó con el hombre, que se trasladaba en otro automóvil, detuvieron los vehículos, los niños se acomodaron en el auto con su madre, y comenzó la pesadilla.

El hombre no solo amenazó a la familia de la mujer, sino que también la golpeó, la corrió desesperadamente alrededor del auto, hasta que abusó de ella, dos veces, sobre la ruta, con las criaturas de testigo.

“Acá te voy a dejar muerta”, le decía, arrojándola contra el suelo, continuando con los golpes y las amenazas, asegurando que si se movía, mataría a las criaturas.

Fue el paso de un hombre, en otro vehículo, el que le salvó la vida a la mujer dando aviso a la policía.

El abusador dejó la escena corriendo, abandonando su auto, pero horas más tarde fue detenido por los efectivos.