Ayer, pasadas las cuatro de la tarde, en el inicio de la calle Sarmiento del Barrio Buenos Aires Chico, una piedra de gran tamaño se desmoronó sobre un garaje lindante a una vivienda.
Por fortuna, ninguno de los habitantes del domicilio afectado se encontraban en el lugar cuando la piedra cayó, por lo cual los daños fueron puramente materiales.
Defensa Civil acudió al lugar luego del llamado de los vecinos, quienes, en diálogo con medios locales, denunciaron que todavía hay piedras en peligro de caer sobre las viviendas edificadas en el área.
Nada nuevo bajo el sol
El 19 de septiembre se realizó en nuestra localidad la presentación sobre riesgos geológicos en San Martín de los Andes, con profesionales del Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR). En la misma, el profesional Fernando Pereyra aseguró que una de las conclusiones de los estudios se indica que “los dos faldeos de la zona del casco céntrico están en rojo”, haciendo referencia al Barrio Buenos Aires Chico, ubicado en la ladera del Cerro Curruhuinca.
En esta oportunidad, el profesional también agregó: “Quiere decir que no se puede hacer nada. Si no hubiera nadie, uno diría no pongan nada, pero ya sabemos que hay gente viviendo ahí. Hay que lidiar con una realidad. Nosotros podemos ayudar, pero hasta cierto punto. Un bloque más grande que un auto no se ataja de ninguna manera, no existe. No se puede. Hay que tenerlo presente porque lamentablemente es así”.
Cabe recordar también que, menos de un mes atrás, el pasado 24 de octubre, el Deliberante local ratificó un acuerdo firmado por el Intendente a cargo Sergio Winkelman con la Secretaría de Asuntos Municipales del Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda de la Nación, para la realización de un estudio denominado “Diseño Ejecutivo Sistema de prevención de riesgos de desastres naturales – área urbanizada ladera del Cerro Curruhuinca”.
El mismo cuenta con un presupuesto para su financiamiento de $2.219.728 y una duración de 8 meses, cuyo objetivo general es el de formular el proyecto ejecutivo del Sistema de Prevención mencionado a fin de contribuir a mitigar parcialmente las situaciones de riesgo geológico e hidrológico identificados en el mismo.
Si bien las autoridades parecen estar al tanto de la delicada situación y su difícil manejo, las tareas de contención y prevención de desastres parecieran no estar a tono con la urgencia que los barrios siguen experimentando día a día.
Foto: RSM (Realidad Sanmartinense)