Este sería uno de los dos prófugos.

(Información del diario La Mañana Neuquen)

Se conoció el rostro de uno de los dos prófugos chilenos que participaron del ataque y asesinato del sargento ayudante de la policía neuquina, José Eduardo Aigo, el 7 de marzo pasado.

Se trata de Alexis Eduardo Cortez Torres, un hombre identificado gracias a documentación de viaje que había en una de las tres mochilas que estaban en la camioneta que conducía Juan Marcos Fernández, hijo del intendente de San Martín de los Andes en el momento del violento crimen.

La identidad de este sujeto fue confirmada por Fernández durante su declaración testimonial en sede judicial. También reveló el nombre del otro prófugo, pero ésta información no trascendió.

Se supo que Cortez Torres ingresó al país por el Aeropuerto Internacional de Ezeiza el 2 de marzo pasado, proveniente de Caracas, Venezuela. Se alojó en un hotel del barrio porteño de Congreso y luego llegó a Neuquén. Entre sus pertenencias también se halló un pasaje de colectivo de la empresa Andesmar con destino a Bariloche.

Si bien, por el momento no se halló información que vincule a Cortez Torres con algún tipo de grupo subversivo chileno, hoy se supo que registra un antecedente “por disturbios” en 2004 en un lugar llamado Tierras Blancas, al norte de Santiago de Chile.

Por su participación en el asesinato del policía neuquino, aunque no se determinó si fue el que disparó sobre Aigo, Cortez Torres es buscado intensamente en un operativo coordinado entre la Policía neuquina, Prefectura y Gendarmería Nacional. Ésta última es responsable de las patrullas nocturnas mientras que la otra fuerza nacional estableció patrullajes en los lagos Quillén, donde está el paso seco al que se presume que se dirigía el trío con intensiones de cruzar a Chile de manera irregular, y el lago Aluminé.

Por el asesinato de Aigo, la justicia emitió un pedido de paradero y alerta contra Cortez Torres, un paso previo al dictado de una orden de captura.