La conmemoración del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia es una nueva ocasión para repudiar el horror instrumentado por un régimen atroz, con complicidad de quienes pretendieron y aún pretenden justificar un hecho que nos avergüenza como sociedad.
Pero también nos lleva a reflexionar sobre aquello que rechazamos y rechazaremos hasta el último de nuestros días: la violencia y las expresiones de odio en cualquiera de sus formas, la imposición de ideas por la fuerza, el silenciamiento, las amenazas, la estigmatización y descalificación de quienes piensan diferente.
Una comunidad que cimienta su supuesto desarrollo económico en la reivindicación de la muerte, de la violencia, del odio y la descalificación, es una sociedad frágil, endeble y vulnerable, destinada al fracaso colectivo. En este 24 de marzo reafirmamos el diálogo, el respeto, la solidaridad, el cuidado, el amor y la construcción colectiva.
Carlos Saloniti, intendente de San Martín de los Andes.