Jaque mate

Si alguien hubiese dicho que Argentina llegaría a la final después de ver el nivel de sus primeros dos partidos, ante Bosnia e Irán,  cualquiera lo hubiera tratado de loco. Argentina ganaba pero no convencía. Pero hay un único responsable, tanto de los planteos equivocados como de los acertados y se llama Alejandro Sabella, el entrenador argentino aceptó sus errores e hizo las variantes justas y en los momentos indicados. Así como se lo criticó en su momento ahora es momento de reconocer sus méritos.

El encuentro fue lo más parecido a un partido de ajedrez, se jugó a pura estrategia, estaba todo estudiado. Ambos entrenadores decidieron primero pensar en mantener su arco en cero y luego atacar. Fueron 120 minutos donde escasearon las llegadas claras, donde hubo momentos de gran tensión y sobre todo de dramatismo. A minutos del final del tiempo reglamentario, cuando las piernas pesaban y el miedo por quedar eliminado se adueñaba de cada uno de los jugadores, Mascherano, el mejor de la cancha, se le tiró a los pies a Robeen y evitó un remate que tenía destino de red. El Jefecito una vez más se convirtió en el alma del equipo.

El partido de ajedrez terminó empatado pero alguno debía pasar a la final e inevitablemente el ganador saldría desde los doce pasos. Se cambió estrategia por azar e intuición, en donde Sergio Romero se tomó revancha del mundial pasado y se puso la capa de héroe al atajar dos penales. Luego Maxi Rodríguez, que también se tomó revancha,  no dudó y convirtió el gol que le dio el pase a la final después de 24 años y justamente ante el mismo rival.  Como si fuese apropósito, el nivel de Messi fue de mayor a menor y el de su selección fue de menor a mayor. Cuando no apareció el capitán, apareció Di María o el mismo Higuaín para poner las cosas en su lugar.

Argentina es la única selección que ganó todo lo que jugó y el domingo irá en busca de su tercera Copa del Mundo ante una poderosa Alemania que viene de golear 7 a 1 a Brasil. Se enfrentarán por tercera vez en una final mundialista y si el conjunto nacional logra su objetivo alcanzaría a los alemanes en cantidad de mundiales ganados. A las 16 horas el Maracaná será el centro de todos los flashes y el conjunto argentino si logra sacrificio en todas sus líneas y con Mascherano y Messi en un buen nivel, el objetivo mayor sin dudas estará cumplido.

@martinmosie