El juicio evaluaba responsabilidades por la muerte de dos niños aplastados por un árbol

02 Ago 2020
    

La jueza federal de Zapala, Silvina Domínguez, sobreseyó a todos los guardaparques y a los miembros de comunidad mapuche Curruhuinca acusados por la tragedia del camping Lolen de San Martín de los Andes, donde perdieron la vida dos niños aplastados por un árbol.

En la resolución conocida este martes, la magistrada sostiene que los implicados no tuvieron forma de prever la caída del árbol que causó la muerte de los chicos.

Según trascendió extraoficialmente, la fiscal federal Karina Martínez Stagnaro apelará la resolución de Domínguez. Los imputados sobreseídos fueron: el jefe del Departamento de Conservación y Manejo, Juan Jones; el titular de Guardaparques, Diego Lucca; la jefa de Uso Público del Parque Nacional Lanin, María Hileman, los guardaparques Eduardo Marchiolli y Matías Encina junto a Milena Cheuquepan y Juan Delgado de la comunidad Curruhuinca.

Al parecer, en la causa consta documentación donde se establece que tanto los guardaparques como la comunidad mapuche se encontraban obligados a realizar una revisión de los árboles previo al inicio de la temporada con el objetivo de garantizar la seguridad de los visitantes.

La tragedia se produjo en la camping Lolen, ubicado en la bahía de Catritre, a orillas del lago Lacar, en el parque nacional Lanín. En el hecho, ocurrido el 1 de enero de 2016, fallecieron Matías Mercanti de 7 años y Martina Sepúlveda de 3.

Además, resultaron lesionadas otras personas, integrantes de las familias que estaban en el lugar festejando el año nuevo. Media docena de ambulancias de Salud Pública, de Bomberos y del SEIN fueron afectadas al traslado de los heridos, algunos de ellos con lesiones de consideración y otros con cortes. Luego se comprobaría que había otros árboles de la misma porción de la cuenca Lácar que estaban en similar condición de riesgo, lo que obligó al apeo preventivo.


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