Cortaron la ruta en Junín sobre el puente del río Curruhué y provocaron el enojo de automovilistas

15 Feb 2021
    

En el marco del fin de semana largo, un grupo de doce personas bloqueó este domingo el tránsito vehicular sobre la Ruta Nacional 40 en reclamo de tierras. La medida provocó inconvenientes en el tránsito y generó momentos de tensión y hasta trompadas entre los automovilistas y los manifestantes a medida que se formaban extensas filas de autos tanto del lado de Junín de los Andes como de San Martin de los Andes.

El corte se produjo en horas de la tarde sobre el puente del río Curruhué y con el correr de las horas los ánimos entre los manifestantes y la gran cantidad de turistas que circulaba por la zona se agitaron hasta derivar en insultos, forcejeos y agresiones. Tuvo que intervenir la Policía para calmar las partes.

En diálogo con LMNeuquen, el intendente de Junín de los Andes, Carlos Corazzini precisó que "es un grupo de 12 familias conformada por personas que vinieron de Cutral Co, otras de Santa Fe y otras familias que bajaron de la zona rural de distintos parajes de las comunidades".

El jefe comunal explicó que "se instalaron en un terreno que estaba previamente usurpado, desde hace 20 años, que pertenece al IPVU (Instituto Provincial de la Vivienda) y no es municipal. Sobre el terreno ya hay un orden de desalojo de la justicia emitida en marzo de 2020 por el juicio ganado por el organismo a la persona que lo tomó originalmente. Por esa razón, a la gente que ahora está ocupando no se le puede ceder el terreno. Por otro lado, hay una orden la de la fiscalía de que no ingresen materiales a ese lugar por lo cual se dispuso una vigilancia permanente de la policía las 24 horas".

Corazzini detalló que el problema de la oferta de soluciones habitacionales es muy complejo. "Los manifestantes pretenden sí o sí un terreno para deponer su actitud pero el municipio no puede dar lugar a ese reclamo porque no tiene las tierras y, en caso tenerlas, estas personas no cumplen con los requisitos que exige la carta orgánica que establece un mínimo de cinco años de residencia. Además, en el Instituto Municipal de Vivienda y Tierras ya hay un listado de gente de Junín de los Andes y de familias que llegaron hace muchos años a la localidad que están en espera. Esto sería de una injusticia total y se generaría un caos", argumentó.

El intendente aclaró que agotaron todas las instancias para resolver el problema y ahora está en manos de la justicia. "Los manifestante estuvieron en Casa de Gobierno el miércoles pasado donde me pidieron si poda dialogar con ellos, este era el cuarto encuentro, ya que en Junín mantuve otros encuentros siendo el último un poco complicado porque hubo amenazas. En el Ministerio de Desarrollo Social, que intervino por pedido de la Defensoría del Niño y el Adolescente, se les ofreció la provisión de víveres, un aporte de alquiler de 20 mil pesos mensuales, el cual rechazaron y desmintieron", relató Corazzini.

Los terrenos del IPVU están ubicados en el casco urbano de la ciudad en el sentido San Martin a Junín de los Andes sobre la margen derecha de la Ruta 40 y pegados al Rio Curruhué. Este lugar es una zona inundable por lo que representa un problema y un riesgo a la hora de urbanizar, explicó el intendente.

Por otro lado, Caty Uriel, referente de los manifestantes explicó: "Nosotros fuimos a Casa de Gobierno y estuvimos tres días durmiendo a la intemperie y nos obtuvimos respuestas. Lo único que queremos es que nos den la posibilidad de poder pagar por nuestras tierras, que el intendente nos ceda los terrenos o que saquen a la policía de la toma para poder entrar con materiales y construir",

"Somos doce familias y veintidós niños y empezamos con los reclamos el cuatro de noviembre. En Junín el intendente se acercó hasta el loteo para ver cuál era nuestra situación y sólo nos ofreció plata. Sabemos que miente ya que la mayoría de las familias que iniciamos el reclamo recibimos su ayuda pero nos pagan un mes y después dejan de hacerlo, así no podemos pagar un alquiler", enfatizó.

Durante la medida se produjeron momentos de tensión entre los manifestantes y los turistas. “Hubo insultos, forcejeos y agresiones, a mi me rompieron la boca y la nariz”. "Ante los incidentes no recibimos ningún tipo de atención medica. Nosotros no queremos la violencia, lo que pedimos, y el intendente lo sabe, es que nos reubiquen en algún loteo social y que saquen la posta policial de la toma", concluyó.