Cuando todo comenzó, desde la mismísima nada, lo único que existía era el “ser”, este ser se dividió en millones de partes para experimentarse por separado…
Cada una de esas chispas de la misma luz eligió un camino para conocerse así misma y experimentar así la ilusión de separación con la fuente.
Todo lo que existe entonces es el “ser”, no importa con que forma se manifestó, todo pertenece a esta unidad, la Tierra, los demás planetas, todo en absoluto tiene el mismo origen.
Nosotros decidimos manifestar nuestro ser como humanos en este planeta Tierra y generamos a partir de un plan esta realidad que vivimos, aunque no seamos concientes de ello.
Cada uno de nosotros vivenciamos la realidad de manera única a través de nuestra percepción de conciencia que nunca es igual a la de los demás seres, es así como aquello que nosotros llamamos o reconocemos como “otros” son en realidad partes de nosotros mismos que eligen modos diferentes de percibir la realidad. Estas otras partes de nosotros mismos nos reflejan y nos complementan, ya que todos somos el mismo “ser”.
En la experiencia de la vida sobre la Tierra, creamos dos polos, “el polo Bueno” y “el polo Malo”, es decir el que es conciente de aquella originaria unión y el que elige la ilusión de separación de la fuente, por miedo y sufrimiento.
Este proceso cumplió ya su ciclo, llego al punto máximo, y nos toca en este tiempo ser partes de este proceso de ponerle fin a esta dualidad.
Estos cambios en la Tierra que estamos atravesando implican que la dualidad llego a su fin y que es momento ahora de elevar la conciencia del planeta reconociendo que no es en nombre del amor que se hacen las guerras, que no es necesario ni parte del amor, vivir el sufrimiento…
Ahora debemos tomar decisiones individuales que ayuden a la Tierra a cambiar esa polaridad, a trascenderla desplazando su eje.
Esa es nuestra misión aquí en la tierra…
Si cada uno de nosotros elige el desplazamiento de conciencia el efecto colectivo elevara el nivel vibratorio de conciencia de la tierra y no tendremos que temer a los desplazamientos físicos en ella que traen catástrofes naturales y económicas.
Cada uno de nosotros tenemos conectada nuestra conciencia individual a la fuente de conciencia universal, y podemos acceder a ella cuando queramos.
A través de nuestras estructuras de pensamiento a lo largo de nuestra estadía en la tierra fuimos generando Karmas como parte del proceso de aprendizaje por el que elegimos pasar. Estas ideas y pensamientos son los que nos llevaron a separarnos cada vez mas de la fuente, de la naturaleza y de las otras manifestaciones de “ser”, son los pensamientos que nos alejaron de la verdad llevándonos a fomentar o ser parte directa de las guerras, la contaminación ambiental y el egoísmo.
Debemos entender que cada pensamiento que generamos tiene energía y” crea” la realidad que vivimos, cada vez que hacemos algo que nos aleje del mal, alimentamos de luz la conciencia colectiva.
Es momento de trascender el EGO, que no es más que la idea de que somos diferentes a los demás, cada vez que nos vemos mejores o peores que otros estamos hablando en nombre del ego, el ego no es más que la ilusión de la separación con la fuente.
Trascender nuestro ego individual es parte de nuestra misión.
Disolviendo el Karma nos alejamos de la conciencia individual y nos acercamos a la universal.
Hay muchas maneras de hacerlo, por ejemplo a través de los sueños podemos cerrar estructuras kármicas, para ello debemos ejercitar y anotar nuestros sueños para ser más concientes de ello.
Otra manera de acceder a la conciencia universal es a través de la meditación donde por medio de la respiración somos uno con todos los seres vivos.
O a través de las afirmaciones positivas y la visualización de ellas, así rompemos con estructuras kármicas y generamos nuevas formas de conciencia del lado de la evolución.
También a través de la regresión a vidas pasadas, deshacemos decisiones erróneas y eliminamos los karmas.
Es momento de que recordemos nuestro propósito, ahora que el planeta se esta manifestando a nivel catastrófico para nosotros.
Cada elección y decisión que tomemos nos afecta en cuanto compartimos una misma conciencia, en cuanto somos partes del mismo “ser” con este despertar de conciencia entonces debemos entender que haciendo sufrir a otros en realidad nos estamos lastimando a nosotros mismos…
El sistema dual sirvió y fue parte del plan para conocer todas los reflejos del mismo ser, pero ahora llego el momento de concluirlo, así estaba planeado.
La aparición de ovnis o manifestaciones de otros planos nos dan su apoyo en la lucha que estamos viviendo hoy y nos ayudan a despertar los recuerdos de quienes somos realmente, debemos superar la idea de que somos la única forma de vida, creer es parte de despertar…
Contemos con nuestros guías espirituales como los Ángeles para que nos ayuden en este proceso, ellos eligieron estar con nosotros, descubramos nuestra misión, recordemos la verdad de quienes somos… verdaderos seres de luz…
lic.sabrinamingrone@smandes.com.ar