“Llegó muerto y ahora tiene una esperanza”

Un nene de dos años cayó ayer al mediodía al arroyo Calvuco, en el barrio Chavra IV detrás de la zona mixta, en un contexto que aún no fue determinado y fue revivido, tras pasar varios minutos sin respirar y sufrir principio de hipotermia, por los médicos del Hospital Ramón Carrillo.

“Dejó de respirar y su corazón de latir. Llegó muerto y ahora está con una esperanza”, comentó el Director del Hospital, Juan Cabrera: “Estaba técnicamente en un paro cardiorespiratorio. Se le hizo reanimación (RCP) en el lugar, en el traslado. Estaba en condiciones de hipotermia, con diez grados menos de diferencia con la temperatura corporal normal, pero después de un trabajo muy complejo  de todos, el chico pudo hacer latir su corazón por su propia cuenta”.

Cabrera agregó que el traslado a Neuquén pudo realizarse a las 17 horas, luego de que se regularizara la temperatura y condiciones indispensables para el pequeño.  

Cabrera destacó la labor de todos los implicados en el manejo de la situación e indicó “suerte que teníamos los elementos técnicos que se necesitan, técnicos, profesionales, choferes, gente de limpieza y todos estuvieron a la altura de la circunstancia”.

De acuerdo a lo informado por el Director del Hospital, el nene “se encuentra en un estado gravísimo, pero estable”, por lo que los profesionales estarán pendientes de su evolución en las próximas horas.