A casi 12 años de comenzada su lucha por un hogar permanente y digno para la tercera edad sin medos económicos, Luisa Rosignolo no baja los brazos, pide que su proyecto sea declarado de interés municipal, y que la Intendente gestione y “se ponga a la altura de la circunstancia”.

09 Jun 2017
    

La lucha de Luisa Rosignolo comenzó hace casi 12 años, un 3 de enero de 2006, cuando ella trabajaba en el Hospital local, “poniendo el hombro” y veía entrar a los ancianos “congelados en invierno y deshidratados en verano”. Fue entonces que se dijo a sí misma que se iba a poner las pilas, “y así lo hice”.

“Salí a la calle con una carpeta con papeles para que la gente firmara dos proyectos”, recordó Rosignolo, el Pájaro Carpintero de San Martín de los Andes, relatando sus primeros días de lucha: “Uno por uno les fui contando sobre mi idea de un hogar de ancianos, de día, o Club de Día como lleva el nombre ahora, y de un hogar permanente y digno, para personas sin medios económicos, inclusive para la clase media que no tiene la posibilidad de acudir a una entidad privada, porque cuesta mucho dinero. Yo iba por la calle, paraba a la gente, le contaba, me decían que era imposible. Pero lo imposible está ahí ahora, en la Junta Vecinal El Molino”.

Luisa habla del Club de Día con la emoción que solo ella puede sentir como propia: “Logré que se hiciera yendo a Neuquén decenas de veces durante siete años, llevando artículos de diarios, firmas... Porque cuando tengo una convicción no hay nadie que me la apague. Fui a PAMI convenciéndolos de la necesidad. No paga nada la Municipalidad de este Club de Día, ni siquiera la combi que retira a los abuelos para llevarlos a sus domicilios. Lo paga completamente todo el Pami. Y si dicen lo contrario es una mentira, aunque su Coordinación sí corresponde a Desarrollo Social”.

“Los políticos de turno se lo adjudican al Club, pero no me interesa”, aseguró, dialogando con Radio Fun: “Lo que me interesa es que esté, no quién diga que lo hizo”.

Al referirse a los dichos de la Intendente Brunilda Rebolledo, que algunas semanas atrás cuestionó la creación del hogar permanente de ancianos con el que sueña Luisa, expresando que en una primera instancia la ciudad debe analizar si quiere, o no, contar con un espacio de estas características, ya que lo ideal es que cada adulto mayor sea cuidado por su familia, Rosignolo expresó: “Sin duda, necesitamos un lugar que concentre a los adultos mayores. Si hay una residencia privada, significa que la necesidad existe. Sale 35 mil pesos por mes la atención. Solo los de elite pueden acceder. Los seis abuelos que están ahí los luché yo, y están siendo “becados” por la provincia. ¿Por qué no vamos a tener nuestro hogar de ancianos? Villa la Angostura lo tiene”.

Rosignolo hizo especial hincapié en que el hogar permanente en el que año tras año deja toda su energía, es algo que beneficiará a toda aquella gente “que tiene que salir a trabajar para seguir comprando los medicamentos de sus adultos mayores y que no puede costear una internación”.

“A la Intendente solo le he pedido gestión. Ella sabe de mi lucha. Nunca le he pedido un centavo al Municipio”, continuó Luisa: “Tengo el terreno, donado por la familia Vita, cerca de la Vega Maipú, que exclusivamente puede ser usado para hacer este hogar. También cuento con el apoyo del Club de Leones y del Rotary, que pueden ayudarme en la construcción, y el arquitecto Francisco Amoroso dijo que haría el proyecto. Quiero que mi proyecto sea declarado de interés municipal”.

Para finalizar, Luisa, cuya preocupación también es la creación de una ONG que impulse su lucha en su ausencia, pidió a la Intendente “que trate de bajar unos escalones hacia su pueblo, que la necesita”, y que reconsidere sus últimos dichos: “La posibilidad de tener el dinero suficiente para mantener a un abuelo en la casa, no la tiene cualquiera. Ayude a lograr esto, porque el hogar permanente será un gran logro para usted. Le pido gestión, que comprenda y que se ponga a la altura de la circunstancia”.