Ayer por la madrugada, una piedra de gran tamaño rodó por el Cerro Curruhuinca derribando todo árbol que se encontraba a su paso, hasta detenerse, milagrosamente, a metros de una casa.
Debido al acontecimiento, que no ocasionó heridos ni daños a la propiedad, desde la Dirección de Defensa Civil comunicaron a los vecinos del Barrio Vallejo y Parque Sur que “se abstengan a transitar la ladera de la montaña ya que la misma no se encuentra segura”.
En el lugar trabajaron efectivos de la Comisaría 23 y de Defensa Civil, entre otras instituciones, que pudieron precisar que la roca, que se habría desprendido por las peligrosas condiciones conocidas del terreno, tenía un tamaño similar al de dos vehículos.