El gobernador neuquino apuntó al centralismo del Gobierno Nacional y reclamó políticas federales reales para las provincias productoras

11 Oct 2025
    

 En una entrevista exclusiva, el gobernador Rolando Figueroa cuestionó con dureza el rumbo del Gobierno Nacional y advirtió sobre el impacto que las decisiones centralizadas de Buenos Aires están teniendo sobre las provincias del interior.


“La Nación se olvidó del interior. Se toman decisiones en escritorios porteños sin conocer la realidad de las provincias que generan la energía, los alimentos y la riqueza que sostiene al país”, expresó Figueroa, en uno de los pasajes más fuertes de la charla.


El mandatario neuquino señaló que la actual gestión nacional “no escucha, no consulta y muchas veces ni siquiera respeta los compromisos asumidos con las provincias”, al tiempo que reclamó un nuevo esquema de relación federal, con más equilibrio en la distribución de los recursos y una mirada estratégica hacia el desarrollo del interior.

“Neuquén aporta al país a través del gas, el petróleo y la energía, pero cuando hay que decidir inversiones o distribuir fondos, pareciera que solo cuenta el AMBA. Ese modelo está agotado”, enfatizó el gobernador.

Figueroa también hizo hincapié en la necesidad de previsibilidad para la producción y las economías regionales, y advirtió que “las medidas improvisadas o impuestas sin diálogo generan incertidumbre y frenan el crecimiento”.

A lo largo de la entrevista, el mandatario neuquino evitó confrontar directamente con el presidente, pero sus declaraciones fueron interpretadas como un llamado de atención político hacia la Casa Rosada. En tono firme, pidió “poner fin al divorcio entre la Nación y las provincias” y retomar un camino de cooperación.

“Nosotros no pedimos privilegios —dijo—. Pedimos equidad. Que se reconozca el esfuerzo de los neuquinos y de todas las provincias que día a día sostienen al país real, el que no sale en los medios porteños.”

Las expresiones de Figueroa llegan en un momento de creciente tensión entre los gobernadores y la administración nacional, en medio de los recortes de transferencias y la falta de acuerdos por obras e inversiones clave.

En Neuquén, su discurso fue leído como una reafirmación del perfil autonomista y federal que el mandatario viene consolidando desde su llegada al gobierno, buscando posicionarse como una voz representativa del interior patagónico frente al poder central.