Brunilda Rebolledo propone recuperar “la militancia”

La candidata participó de distintos encuentros con afiliados en los barrios La Cascada y Las Rosas, a quienes les pidió su voto de confianza: “esta campaña nos convoca por dos grandes objetivos: el primero, recuperar la militancia. Hay una apatía producto de la falta de convocatoria, que es un llamado de atención para la dirigencia”, les expresó.  

Al referirse a su trayectoria les dijo que “es la primera vez que aspiro a un cargo político en la seccional. Mi trabajo, mi militancia ha sido siempre en el campo de lo social. Inicié mi actividad laboral en salud pública hace casi cuarenta años y tengo la satisfacción y el privilegio de haber trabajado siempre actividades que me apasionan, y constantemente con la gente. Mi decisión de participar en esta interna tuvo que ver con un agradecimiento profundo a mi partido, que me permitió desarrollar un potencial que yo misma no conocía”.

“El otro objetivo –prosiguió- es recuperar el municipio, porque este es un derecho legítimo de cualquier partido, y porque nuestro postulado de origen, se basó en la justicia social y queremos seguir ejerciendo ese postulado”, dijo.

Además, expresó la dirigente que “queremos una seccional inclusiva, que sea la casa política de los afiliados”.

En otro tramo de la campaña, en donde  recorrió casi toda la zona rural, como Trompul, Quila Quina, Pailamenuco, Cordones del Chapelco, recibió con total aceptación dos propuestas que le formularon y que cumplirá cuando asuma: que la seccional Lacar cuente con un referente de cada paraje, y que se trabaje en la creación de un centro de distrito en Cordones del Chapelco, en chacra 30.

“Nuestra campaña –explicó Rebolledo en un alto de su actividad proselitista- se basó en promover encuentros en casas que ofrecieron distintos afiliados con pequeños grupos, las que fueron amenas y nos dan mucha confianza en un rotundo triunfo de la lista AZUL, mientras reflexionó en que “debemos generar la confianza de nuestros afiliados y nuestro propósito es tener una seccional inclusiva y desde donde se genere la participación. Sabemos que esta palabra esta vaciada en su contenido y queremos resignificarla abriendo el juego para que la gente pueda ir, que sienta que es su casa política, que traiga sus inquietudes porque seremos los encargados de construir una plataforma de gobierno”.

En este sentido, Rebolledo hizo hincapié en que “la gente, las juntas vecinales, las organizaciones que se juntan espontáneamente por los intereses que comparten, son “los que saben mejor que nadie qué es lo más importante para su ciudad, saben priorizar los momentos y las necesidades”.

Acerca de las expectativas que tienen los afiliados, dijo que “una de las cosas que rescato de las campañas del MPN, son los reencuentros con la gente. Y si entendemos que los reclamos tienen como razón de ser un reclamo de presencia del Estado, es lo mejor que nos puede pasar. Que nos cuestionen”.

En tanto, expresó que “estamos orgullosos de nuestros compañeros candidatos a presidente de la Junta de Gobierno, Omar Gutiérrez y a presidente de la Convención Provincial, Rolando Figueroa, porque son jóvenes políticos, con mucha experiencia de gestión y una actitud adulta y madura. Estamos todos en la misma sintonía y queremos lo mejor para el Movimiento Popular Neuquino. Un especial reconocimiento merece nuestro gobernador, que ha fortalecido su liderazgo con una decisión tan importante como lo es crear espacios para que los jóvenes militantes se integren a la gestión política, y también otorgándonos un voto de confianza a quienes integramos las listas a las candidaturas que estamos dispuestos a honrar”.

Acerca de qué les espera después de esta elección, Brunilda Rebolledo reflexionó que “desde ya sabemos que después del 24 de agosto, comienza una nueva etapa, la de fortalecer las instituciones partidarias y promover un verdadero encuentro. El MPN ha tenido la capacidad de captar a gente muy valiosa que nos ha enseñado que hay un solo camino para conducir: el de la verdad, el compromiso y el trabajo”, finalizó.