Durante el fin de semana largo se movilizaron la mitad de los turistas habituales

Unas nueve mil personas se movilizaron este fin de semana largo hacia los principales destinos turísticos de la provincia, a partir de los datos que surgen de los permisos solicitados para circular.

Los niveles de reservas y ocupación fueron del 15 por ciento promedio, lo que implica la mitad de lo registrado habitualmente para un fin de semana largo previo a lo que será la temporada de invierno.

Así lo informó la ministra de Turismo de la provincia, Marisa Focarazzo, quien detalló que en San Martín de los Andes la ocupación rondó el 20 por ciento, al igual que en Villa La Angostura, mientras que otros destinos como Villa Pehuenia estuvieron alrededor del 10 y Caviahue un 5 por ciento.

“En este tipo de fin de semana largos la afluencia de turistas es moderada, incluso en situaciones normales, es decir, sin pandemia, porque la gente se prepara para la temporada fuerte de invierno”, resaltó Focarazzo, en declaraciones a LU5.

Respecto a esto último, la funcionaria dijo que el sector “está esperanzado en que se realice la temporada, a la espera de la fecha de apertura”. Y agregó: “Necesitamos el tránsito desde distintas provincias, dado que desde febrero venimos haciendo promociones de Neuquén en los mercados emisores como Buenos Aires y Córdoba”, apuntó.

Focarazzo analizó que si bien el nivel de contagios todavía es alto, esto fue bajando “gracias a la responsabilidad de todos”. Indicó que tanto los operadores turísticos y gastronómicos “ofrecen una prestación seria y se están preparando desde mayo con los protocolos para recibir turistas, teniendo en cuenta, por ejemplo, la implementación de la ventilación cruzada”.

“Hay una gran necesidad de hacer funcionar a esta industria, que da trabajo a miles de personas. El impacto negativo en la economía en 2020 fue muy importante y después en enero y febrero se dieron los mayores ingresos. Eso representó un gran movimiento pero no subsanó los meses en los que no se trabajó. Por eso trabajamos para tener temporada de invierno”, dijo Focarazzo.

“Lo que analizamos es que al comparar lo que fue la temporada de verano con la cantidad de contagios vemos que fue mínimo el impacto, contrario a lo que sucede en las reuniones sociales. El turista viaja con burbuja y en los destinos se hacen cumplir de manera muy estricta los protocolos”, aseguró.