Raúl llegó ayer a San Martín de los Andes, desde Trenque Lauquen, junto a su perro y la promesa de que lograría completar el viaje, para que cada día más gente pueda colaborar en esta búsqueda desesperada y a la vez, llena de esperanza: #UnCorazónParaBauti.

15 Nov 2016
    

Bautista Caballero tiene 14 años y lucha por su vida desde febrero, en el Hospital Garrahan, mientras espera, conectado a un corazón de mentira, el trasplante por uno de verdad.

 

Bautista está cansado, pero su familia no lo deja rendirse. Ni su mamá, Yanina Suárez, ni su abuelo, Raúl, quien el jueves salió de Trenque Lauquen, de donde son oriundos, para recorrer rutas y pueblos del sur del país, buscando que los argentinos tomen consciencia sobre la importancia de la donación de órganos.

“¿Qué voy a hacer esperando un llamado? ¡¡¡Tengo que concientizar a la gente!!! Voy a traer el corazón de Bauti, no gano nada llorando en mi casa, algo tengo que hacer", dijo Raúl antes de emprender su viaje, que lo trajo desde ayer a San Martín de los Andes, junto con su perro y una bandera que reza “Un corazón para Bauti”, la cual cuelga bajo la lluvia, contra viento y marea, para que todos puedan verla.

Hace tan solo unos meses que el joven  Bautista fue diagnosticado con miocardiopatía dilatada severa, razón por la que su mamá, durante las pasadas vacaciones, había notado que sus ojos se habían teñido de un preocupante color amarillo, razón por la que acudió en primera instancia al médico.

El pequeño está hoy en terapia intensiva, pero no se quiere morir. Y su única opción de sobrevivir, es un transplante. Algunos días se despierta esperanzado y otros muy triste, producto un poco de los vaivenes de la enfermedad, y otro poco por el miedo que le despierta que ya hayan pasado 10 meses sin solución.

Para ser donante, basta con manifestarlo en el INCUCAI, el organismo nacional de Ablación e Implante, y registrarse. Solo así es posible ayudar.

La mamá de Bautista también creó un sitio en Facebook, Un corazón para Bauti Caballero, donde difunde el estado de salud de su hijo e información sobre la donación de órganos.

Bautista espera un milagro que solo será posible si los que tenemos que tomar decisiones en los momentos más tristes de nuestras vidas, lo hacemos con generosidad. Con amor. Porque cuando una vida se termina, otras se llenan de esperanza.