Es por la falta de comparecencia a las audiencias citadas por la Secretaría de Trabajo en virtud de ciertas irregularidades en la construcción de las “108 Viviendas”.

17 Feb 2011
    

El interventor local de la UOCRA, Guillermo Olarán, solicitó a la Secretaría de Trabajo que obligue a los funcionarios del ADUS y del municipio a comparecer por la fuerza pública,  a una nueva audiencia para tratar las irregularidades que presenta la construcción del plan denominado 108 viviendas, en Chacra 30.

El interventor dijo además que “si a la próxima reunión –la tercera- no concurre nadie vamos a presentarnos ante la Fiscalía ya que existe a nuestro entender incumplimiento de los deberes de funcionario”.

El problema comenzó con una serie de denuncias presentadas por adjudicatarios y contratistas a la sede local de la UOCRA quien a su vez le indicó al Ejecutivo municipal que “con los fondos previstos no se pueden construir viviendas como marca la ley”.

Ante eso la UOCRA pidió una inspección en conjunto a la Secretaría de Trabajo donde según la UOCRA se constató “la existencia de trabajadores en negro, sin la ropa adecuada, sin obra social y seguro”, por lo que el gremio solicitó una primer audiencia a la que no concurrió ningún representante de la comuna o la ADUS, razón por la cual se convocó a una segunda que tenía que haberse desarrollado el miércoles pasado,  donde solo se presentaron los representantes gremiales.

Olarán dijo que “los funcionarios no se presentan y nadie los sanciona, por eso les pedí que se los haga complacer por la fuerza pública, a ver si así van, y que además se los sancione al igual que ocurre con el sector privado”.

El interventor aseguró que “desde el ADUS dicen que ellos  solo prestan el dinero pero no tienen nada que ver con la obra y no es así, aquí hay responsabilidades compartidas y se deben hacer cargo”.

 

Transparencia

 

El interventor indicó que “para las 108 viviendas se van a destinar entre 6 y 7 millones de pesos para comprar materiales, allí debe haber transparencia y compulsa de precios;  porque la gente que nos viene a ver quiere saber cuánto se paga el ladrillo, el cemento y el resto de los materiales”.

Olarán dijo que “si esto no es así el que compra, contrata y maneja la plata es otro, pero el que paga es el adjudicatario,  entonces cuál es el negocio? (…),  yo creo en la buena fe de todo el mundo, pero estúpido no soy, estamos en la Argentina en el 2011 y sabemos como funcionan las trampas”.

El gremialista dijo además que “le dan $ 85 mil al vecino para hacer la casa y cuando éste dice que con ese dinero no alcanza le dicen que se quede tranquilo que después van a conseguir 20 mil más, pero esto lo paga el vecino, o lo que es peor nadie paga nada y se quiebra el sistema”.