“Todas las alternativas significan una reducción importante de recursos para nuestra provincia, que ese trasladaría a los municipios neuquinos”, observó el vicegobernador en caso de que la Corte Suprema falle a favor del reclamo de la provincia de Buenos Aires.

30 Ago 2017
    

El vicegobernador Rolando Figueroa se refirió esta semana a la controversia planteada a partir de la demanda presentada por el Gobierno de la provincia de Buenos Aires en relación al Fondo del Conurbano Bonaerense, y dijo que dicho reclamo “nos afecta directamente a todos los neuquinos, en la medida en que cuestiona la distribución actual del impuesto a las Ganancias y la asignación de los fondos específicos asociados al mismo”.
 
Figueroa, recibido de la carrera de contador de la UNCo y especialista en Tributación, hizo un pormenorizado análisis del tema por sus implicancias económico-financieras para la provincia y planteó su preocupación en caso de que la Corte Suprema de Justicia falle a favor de tal demanda.
 
“Ya sea que se restituya por completo el Fondo a la Provincia de Buenos Aires, que comience a participar de la distribución de dicho excedente y del Fondo de Obras de Infraestructura e incluso si se optara por eliminar ambos fondos y se reintegraran a la masa coparticipable bruta; todas las alternativas significan una reducción importante de recursos para nuestra provincia, que se trasladaría a los municipios neuquinos”, explicó y remarcó que la intención de la gobernadora de Buenos Aires María Eugenia Vidal –con el apoyo explícito del presidente Mauricio Macri– es recuperar íntegramente el Fondo y las sumas retroactivas.
 
El vicegobernador neuquino calificó la disputa como una nueva manifestación “donde se actualiza la histórica tensión que signó a nuestra nación desde sus orígenes: Buenos Aires vs interior, que tantas veces se puso de manifiesto en momentos clave del proceso independentista”, y destacó que la controversia actual “es una muestra más de que Nación se limita a discutir la cuestión impositiva, eludiendo el debate de fondo: una revisión profunda del sistema tributario y la definición de un nuevo sistema de coparticipación federal de impuestos”.
 
En ese sentido, también criticó que se pida a las provincias que moderen el impacto del impuesto a los Ingresos Brutos, “nuestra fuente principal de recursos propios”, y recordó que las provincias debieron asumir la responsabilidad de proveer educación y salud, “obligaciones que en otros tiempos eran competencia del Gobierno Nacional”.  
 
El mandatario tampoco pasó por alto los cambios en política económica implementados por el actual Gobierno Nacional que, si bien significaron beneficios para ciertos sectores productivos, “repercutieron negativamente en sus fuentes de financiamiento como fue la decisión de eliminar o disminuir las retenciones al sector agroexportador. El Estado perdió recursos y no logra compensar esa pérdida”.
 
Finalmente, consideró que es el Estado Nacional quien debe encontrar la manera de dar respuesta al reclamo bonaerense, “sin que ello signifique perjudicar las arcas provinciales”. “No podemos seguir avalando la histórica y casi natural tendencia a que los intereses de Buenos Aires predominen por sobre los del interior. Debemos levantar la bandera del federalismo más alto que nunca, contribuir a una mayor integración nacional respetando las particularidades y autonomías provinciales, y propender a la superación de esta tradicional división entre provincias subordinadas y directoras”, concluyó.