Luis “Toti” Manganaro se encuentra nuevamente recorriendo los caminos de la política provincial, luego de estar inmerso en el silencio, a causa de un problema de salud, tras ocupar importantes cargos, décadas atrás, como titular de la Secretaría de Hacienda neuquina, con solo 27 años, la presidencia del Banco de la Provincia y el Ministerio de Seguridad y Trabajo.
Presentando hace seis meses, barrio por barrio, su ONG Neuquén PorVenir, Manganaro asegura que se rige bajo la línea del Movimiento Popular Neuquino, “con el ideario de los fundadores y la filosofía inalterable”, aunque destacó: “Estamos ante un momento refundacional, donde hay que adecuarnos a los nuevos tiempos. Las recetas aplicadas para conducir están haciendo agua; los resultados del domingo tienen que enseñar a reconocer la realidad”.
En diálogo con Radio Fun, detalló su “nueva propuesta dentro del partido” y aseguró: “Buscamos ser un canal de participación ante un partido cerrado a tenerla, que no convoca y no está escuchando a la gente”. En relación a esto, Manganaro destacó “la actitud de la Seccional Lácar”, y expresó que “es la primera vez que me abren las puertas, lo que no quiere decir que coincidan conmigo, sino que me reciben porque soy parte del partido y porque vengo a traer propuestas e ideas”.
“La realidad se palpa recorriendo calles y abriendo espacios de participación”, afirmo, señalando que es en ese contacto en el cual es importante “estar dispuesto a ponerle la cara a la crítica”, diferenciando que “hay gente no lo está”.
El ex funcionario indicó que “el MPN es un partido que nunca convocó a un congreso provincial en el que hable la gente” y aunque precisó tener “un vínculo histórico” con el gobernador Omar Gutiérrez, aseguró que es a él a quien se le deben pedir las explicaciones pertinentes tras los resultados de las legislativas del domingo: “Los candidatos honraron con responsabilidad, esfuerzo y trabajo toda la campaña, pero lo hicieron solos, sin el acompañamiento político de estructura del partido y del gobierno. Evidentemente no han estado y el resultado fue adverso. El que fue derrotado no fue Chani Sapag, sino todo el MPN como partido”.
De acuerdo a Manganaro, “los responsables de la estrategia y el camión electoral son dos, el presidente del partido, Omar Gutiérrez, y el de la Convención, Rolando Figueroa, y son quienes tendrían que estar dándonos las explicaciones del caso y decirnos cómo piensan corregir el rumbo del barco, para que en e 2019 no tengamos la triste noticia de perder la gobernación de la provincia”.
Reiterando la necesidad de “refundar” el partido, expresó que es necesario “que los compañeros sepan que tienen la posibilidad de participar, de volver a levantar su voz, sin miedo de ser tildados de traidores ni de disidentes, en un marco de respeto y de debate de ideas, que es lo que nos va a sacar adelante”.
Manganaro sintetizó que mediante su nueva ONG, se encuentra en busca de “terminar de consolidar un proyecto con aspiraciones de transformar la realidad”, que incluya “poner la verdad arriba de la mesa, para decirle a la gente, mediante el MPN, que vemos que la salud no funciona bien, la educación, la seguridad, que tenemos severos problemas sociales, de pobreza, de infraestructura y en todos lados… queremos que una voz reconozca la verdad”.
“No podemos pensar en el desarrollo de la provincia cuando no está administrada”, dijo y concluyó: “Mis dichos no hacen daño al partido, por el contrario, lo fortalecen, porque necesitamos reinventarnos, amigarnos con la población, decirles que nos pusimos a pensar, a criticarnos, que somos conscientes de los errores, que los problemas tienen solución y cómo lo vamos a hacer. No tenemos que cambiar las banderas de los fundadores, tenemos que recuperarlas, adaptándolas a las formas y metodologías del siglo XXI”.