Carabineros de Pucón, en el vecino país de Chile, detuvieron ayer, pasadas las 3 de la madrugada, al neuquino Ariel Dagoberto Velásquez, de 47 años, acusado de haber cometido dos violaciones en el país trasandino, a bordo de un automóvil gris con patente argentina.
El Jefe del Operativo detalló que las mujeres tienen 24 y 56 años, que ambos hechos se registraron la noche del miércoles, con tan solo dos horas de diferencia, y que el modus operandi utilizado por Velásquez consistió en identificarse como funcionario de la Policía de Investigaciones y obligar a las víctimas a subirse al vehículo que conducía, argumentando que eran sospechosas de venta de droga, por lo que debían acompañarlo a verificar y registrar sus domicilios para colaborar si es que eran inocentes.
Según lo informado, este individuo con domicilio en Neuquén capital y acusado también de robo y posesión de droga en México en el año 2009, habría abordado a la primera mujer en cercanías de Universidad de la Frontera Campus Pucón (UFRO), pasadas las 21 horas. Hasta que logró su cometido, además la golpeó con rotunda violencia en el rostro y cuello.
A la segunda víctima la encontró a las 23.30 y desde allí la trasladó hasta sector Aeropuerto de Pucón, donde procedió a abusar de ella golpeándola violentamente como a la primera víctima.
En un rápido operativo de inteligencia que incluyó disparos y una gran persecución, los Carabineros lograron detener al hombre tras concretar un plan de cierre perimetral, en cercanías al hospital, en las afueras del Liceo ubicado en la calle Uruguay.
Las mujeres, ambas oriundas de Chile, fueron trasladadas al hospital de Villarrica para los exámenes de rigor.
Horas después de finalizado el accionar, las autoridades tomaron conocimiento de una tercera víctima de Velásquez, a quien también habría intentado abusar en el periodo horario mencionado, aunque afortunadamente logró forcejear con él hasta poder escapar, mediando gritos y pedidos de exhibición de placa en una vía muy transitada. La joven, de 27 años, salía de trabajar de un reconocido supermercado céntrico. Si bien aún se intenta reconstruir el escenario, ella habría sido la primera atacada de la noche.