Año complicado para el campo neuquino

En los albores de su 2º año en el cargo de vicepresidente de la Rural de Neuquén Zimmerman se refirió al pasado año como un muy particular y complicado, por efecto de la caída de la ceniza volcánica y la sequía que azota al campo neuquino con consecuencias muy graves.

En tal sentido el directorio en pleno se encuentra realizando las gestiones provinciales y nacionales que ayuden a paliar la situación “por suerte se sancionado la declaración de desastre y emergencia en toda la provincia, que es una herramienta muy necesaria para afrontar estas situaciones que son imprevisibles y muy dañinas”.

La mayor preocupación de la gente de campo respecto de la sequía es la falta de producción de forraje en los suelos con la consecuencia natural de obtener menor disponibilidad de alimentos para los animales mermando la producción de la hacienda. “Como la producción de pasto en la zona es muy estacional –primavera y veranos – el tema es afrontar el próximo invierno; por suerte no se han producido mortandades y no va a suceder porque la situación nos va a obligar a vender los animales.”

“La emergencia es una situación que se va a prolongar, porque no se corta con la próxima lluvia, así que tenemos dos años por delante en los cuales animales que no se preñaron este año van a ser menos producción el año que viene y menos en el tercer año que sería cuando el ternero estaría listo para la faena; así que tenemos que tratar de sostener esta situación logrando que se aplique la ley de emergencia que es muy buena” explicaba Zimmerman.