Dado que el hantavirus se transmite a través de roedores silvestres, es muy importante seguir las recomendaciones para reducir al máximo y evitar el contacto entre las personas, sus alimentos y viviendas, y los roedores.

09 Ene 2021
    

Esta enfermedad se presenta de forma permanente en la región norpatagónica, y es por ello que todos los años hay personas que se contagian. Dado que el hantavirus se transmite a través de roedores silvestres, es muy importante seguir las recomendaciones para reducir al máximo y evitar el contacto entre las personas, sus alimentos y viviendas, y los roedores. En el verano, época en que se realizan más salidas a los ambientes agrestes, es necesario extremar los cuidados.

La enfermedad por hantavirus es una zoonosis provocada por el virus Andes. Se transmite al ser humano por roedores silvestres. En el caso de la Patagonia, por el ratón colilargo (Oligoryzomys longicaudatus), un roedor nativo que se encuentra presente en toda la jurisdicción del PN Lanín y alrededores.

Es un pequeño roedor de pelaje corto y suave, dorso café claro a amarillo ocre y vientre grisáceo. Es llamado «colilargo» dado que su cola mide dos veces su cuerpo. El cuerpo mide entre 6 y 8 cm mientras que la cola alcanza los 11 y 15 cm de longitud.

La enfermedad puede generar un cuadro grave de disfunción pulmonar, y tiene una tasa de letalidad alta, de entre el 30% y 40% de quienes transitan la enfermedad.

El hantavirus se transmite fundamentalmente por inhalación de aerosoles cargados de partículas virales provenientes de las heces, orina y saliva de roedores infectados. Otras posibles vías de transmisión son: contacto con excrementos o secreciones de ratones infectados con las mucosas conjuntival, nasal o bucal, o mordedura del roedor infectado.

La transmisión a las personas generalmente ocurre al introducirnos en el hábitat de los roedores en zonas suburbanas y ambientes rurales, principalmente en los alrededores de las casas y durante el desarrollo de actividades laborales, recreativas, o en lugares cerrados como galpones o depósitos. También existe evidencia de transmisión persona a persona, y por ello, las secreciones y otros fluidos humanos deben considerarse potencialmente peligrosos.

Para el desarrollo de las actividades al aire libre es importante seguir las medidas de prevención habituales para una visita segura:

-Acampar sólo en lugares habilitados, libres de maleza, alejados de pilas de madera y matas de vegetación cerrada.

-Usar carpas con piso; no dormir directamente sobre el suelo.

-No introducir en la boca tallos, hojas, frutas o granos silvestres.

-Sólo tomar agua embotellada o de la red potable.

-No ingresar a construcciones cerradas o abandonadas.