Dos personas se alojaron del viernes 15 al sábado 16 en el albergue del SUM de El Arenal. Nadie conoce sus nombres ni su ocupación porque no quedó asentado en el acta que redactó la encargada Isabel, por órdenes de su jefe en la secretaría de deportes municipal
“Le dije a mi jefe. Que hago ¿Lo anoto o no anoto? Y me hizo como que lo deje pasar. Por eso yo no lo asenté en el acta, no puse los nombres ni apellidos de las personas que venían. Solamente puse de donde venían”, relata la empleada.
Venían de Villa Traful, confirmó Goldbaum, coordinador de deportes municipal y según sus dichos eran trabajadores municipales de esa localidad. Aseguró que habían realizado desmanes importantes en todo la dependencia municipal y que faltaban las llaves que les entregaron para poder retirarse al día siguiente.
“Él (Diego Goldbaum) vino y me dijo que a la noche tenía que recibir a esta gente”, indicó Isabel, que al día siguiente se encontró con los desmanes realizados por estos dos sujetos desconocidos que pasaron la noche en un edificio municipal, vaciaron el matafuegos por todo el lugar y quien sabe que más, y se retiraron del lugar temprano la mañana siguiente.
Por su parte Isabel, consternada por la situación indicó “no solamente esta vez, varias veces pasan cosas, y uno no tiene que olvidarlas, porque yo trabajo para el municipio y acá ellos ni siquiera dan la cara, de decir quién viene, quién dentra (sic) quién sale” y agregó “yo soy agradecida porque tengo un trabajo pero yo no voy a tapar a nadie. Me da bronca e impotencia, porque hay muchas cosas que se tapan y estoy cansada de tapar.”
Cabe recordar que el SUM de El Arenal es administrado por la Subsecretaría de Deportes Municipal, a cargo de Pablo Freire y cuyo coordinador deportivo es Diego Goldbaum.
La foto del acta escrita por Isabel está reproducida en el sitio web "La Otra Cara Digital" en la nota Gimnasio del Arenal: Dos extraños, con comportamiento extraño y un gran hermetismo oficial.
Hasta el momento se desconocen los nombres, ocupación y procedencia de estas dos personas, que se beneficiaron del albergue municipal, y que a pesar del cordial recibimiento y del servicio gratuito (¿?), realizaron todo tipo de desmanes como vaciar el contenido de los matafuegos por cada uno de los rincones del lugar.