Por Erica Sánchez
Los barilochenses percibieron durante las últimas semanas una gran cantidad de moscas, inusuales en la zona. Muchos, incluso, llegaron a afirmar que se vive una invasión de moscas y la pregunta “¿por qué tanta mosca?” parece empezar a tener respuesta.
Tiempo Patagónico consultó a una especialista que se encuentra trabajando en el tema y la hipótesis preliminar parece ser la ausencia de chaquetas amarillas. ¿Cómo? Las moscas están incluídas en la dieta de las chaquetas amarillas, y al verse estas últimas afectadas por la ceniza volcánica, este año habría más moscas, simplemente porque no hay quién las coma. Todo un ciclo natural importante de la naturaleza, afectado por la erupción volcánica.
Las Doctoras en Ciencias Biológicas Paola D’Adamo y Mariana Lozada, Investigadoras del Conicet, trabajan en el tema “moscas- ausencia de chaquetas amarillas” (que va de la mano) en el Laboratorio Ecotono, INIBIOMA – Universidad del Comahue. Allí han recabado datos sobre la cantidad de moscas en lugares donde hay y donde no hay chaquetas.
La Dra. D´Adamo explica que “es evidente que en los lugares donde cayó ceniza la presencia de chaquetas este año es mínima en relación a otros años. Sin embargo, desde el fondo del Lago Gutierrez hacia el sur, la presencia de chaquetas es comparable a la de otros años. En estos lugares, donde hay chaquetas, la presencia de moscas es normal (se observan poquísimas moscas al colocar un cebo de carne). Sin embargo, estamos observando que en lugares como Llao Llao, donde recién ahora se están observando algunas chaquetas, la presencia de moscas es altísima (al colocar un trozo de carne en pocos minutos este queda negro tapado de moscas)”.
La investigadora relara que “por estos días que en esta zona empezamos a observar algunas chaquetas hemos sido testigo de cómo la chaqueta al llegar a un recipiente con carne, plagado de moscas, rápidamente agarra alguna y se la lleva al nido, volviendo mas tarde a repetir el comportamiento. Estos estudios están en curso para sacar conclusiones acabadas, pero pareciera haber una relación directa entre la ausencia de chaquetas y el incremento de las moscas. Las chaquetas no solo comen las moscas adultas sino que predan también sobre las larvas. En este sentido, realizamos un estudio en el año 2000 sobre la dieta de las chaquetas, que mostró que los dípteros (moscas) se encontraban entre sus presas más comunes (Cita: Paula Sackmann, Paola D’Adamo, Mauricio Rabinovich and Juan C.Corley; Arthropod prey foraged by the German Wasp (Vespula germanica) in NW Patagonia, Argentina, New Zealand Entomologist 23: 55-59 December 2000)
¿Cuándo se irán las moscas? Todo indica que cuando caigan las primeras heladas.
Esta situación sirve para comprender lo sutil que son los equilibrios en la naturaleza. De la misma manera el cambio climático puede dar lugar a modificaciones en el medio. Ya sea por el aumento de los promedios de temperatura o por la modificación en las cantidades de lluvia.
De esa forma vectores de ciertas enfermedades pueden aparecer en regiones donde antes no se desarrollaban, por citar un solo ejemplo de tantas posibilidades.
Fuente: tiempopatagonico.com