En el estadio Ruca Che se realizó la ceremonia de clausura de la XXIV edición de los Juegos Binacionales de la Araucanía. De la competencia, la más importante en Latinoamérica en las categorías juveniles, participaron más de dos mil atletas, técnicos y entrenadores de las seis provincias patagónicas argentinas y de seis regiones del sur de Chile.
El gobernador Jorge Sapag y su par rionegrino, Alberto Weretilneck, presidieron el acto.
En su discurso, Sapag agradeció a “todos los que participaron en estos Juegos, porque generaron un espíritu de camaradería, de amistad y de integración que permitió cumplir el objetivo, que era que todos se sintieran en casa, que se sintieran en familia, como verdaderos hermanos, argentinos y chilenos, patagónicos de ambos países”.
Pidió un especial reconocimiento a cada uno de los integrantes de la subsecretaría de Deportes de la provincia “porque ellos cargaron sobre sus espaldas toda esta organización para que ustedes tuvieran un momento de alegría y felicidad”. También agradeció a los coordinadores, entrenadores y atletas y dijo que “hoy podemos decir que ganamos todos”.
Weretilneck, por su parte, agradeció a la provincia de Neuquén por “la fantástica organización de estos Juegos”. Rescató “la hermandad entre chilenos y argentinos que se vio en estos seis días de competencia” y lo comparó con las reuniones del Comité de Frontera de Los Lagos que sesionó días atrás en Bariloche, donde “las regiones chilenas y las provincias argentinas trabajan coordinadamente en mejorar los vínculos entre ambos países”.