La seleccionaron para Red Bull Formation, una prueba extrema en el desierto de Utah. Brilló en una bajada de riesgo junto a otras siete atletas destacadas.

06 Jun 2021
    

La sanmartinense Camila Nogueira brilló esta semana en la prueba Red Bull Formation, reservada para las ciclistas más audaces del mundo. Fue la única representante de Sudamérica y superó con éxito una bajada de riesgo en el desierto de Utah, en Estados Unidos, junto a otras siete deportistas destacadas de distintos continentes.


Camila es oriunda de San Martín de los Andes y una apasionada de la bici desde que tenía cinco años. Ganó innumerables torneos de mountain bike a nivel local, nacional e internacional y, desde hace más de tres años, está radicada en Aspen, Estados Unidos.


Por su meteórica carrera como deportista, Red Bull la eligió este año entre las ocho ciclistas mejor preparadas para una prueba extrema, en la que deben planificar una bajada sobre la ladera de una montaña, entre acantilados y bancos de arena.




“Nací en San Martín de los Andes y, desde muy chiquita, mi papá me llevaba a andar en bici, después arranqué a competir en carreras de mountain bike a nivel local, regional y nacional y, a los 16, empecé correr internacionalmente”, recordó Camila.


A la edad que otros adolescentes piensan en el viaje de egresados, ella recorría países a uno y otro lado del Atlántico con su bici. Desde muy joven, pasaba tres meses al año en Europa para la temporada de torneos, porque eso le permitía hacer viajes más cortos y trabajar mejor con los sponsors.


Hoy, con 26 años, la sanmartiniense es una atleta consagrada, radicada en Colorado. “Conocí a mi novio, que es mitad argentino y mitad estadounidense, y nos mudamos ahí”, explicó.




Cuando puede, viene de visita a rodar por la Cordillera de los Andes y los paisajes patagónicos. Indicó que el 2020 fue la excepción por la pandemia, “pero, si es posible y se vuelven a abrir las fronteras, quiero ir en octubre para allá porque me gusta muchísimo andar en bici en Argentina y tengo un proyecto para filmar un video en Salta”.


Sobre la prueba de riesgo que protagonizó en el desierto estadounidense, comentó que “fue una semana muy intensa y con mucho trabajo porque en Utah es verano, hace mucho calor y fueron ocho horas diarias bajo el sol”.


El primer día sufrió una caída y temió que le impidiera terminar la prueba. “A la mañana siguiente, me levanté toda dolorida, pero por suerte no me pasó nada, pude seguir y creo que cumplí con mi objetivo de hacer una bajada fluida y entera por toda la pista”, contó.


En Red Bull Formation, las mismas atletas deben marcar sus “líneas” de bajada con picos y palas. Es una prueba de destreza y fortaleza no competitiva. La edición 2021 comenzó el 24 de mayo y concluyó este martes 1 de junio.


“Tenés tres días de construcción del circuito, donde le ponés altos y lugares muy técnicos, y no podés fallar porque a los lados tenés precipicios y hay que ser muy precisos”, subrayó Camila.




Recalcó que las montañas de Utah “no tienen árboles y es muy bueno para el free ride, porque ves todo desde abajo y el evento en sí consiste en que vos te armes tu propia línea, por la que luego vas a bajar”.


Junto con Camila, participaron otras siete ciclistas destacadas de Nueva Zelanda, Australia, Canadá y varios países de Europa. “Fue increíble, una experiencia nueva en la disciplina free ride, porque hay un evento muy famoso que se llama Red Bull Rampage, donde por ahora sólo participan hombres, y este que se llama Red Bull Formation es el primero de mujeres”, resaltó la atleta neuquina.


Señaló que nunca sintió que la menosprecien como mujer que se desenvuelve en un deporte extremo, “aunque son más los hombres que lo practican”. Añadió que, gracias a las deportistas que se arriesgan a lo nuevo, en todas las disciplinas, hay cada vez una mayor participación femenina.




Agregó que su carrera deportiva tuvo muchos momentos de gloria, pero su recuerdo más vívido “fue haber salido campeona panamericana en Argentina, con toda mi gente ahí; es una imagen que me va a quedar guardada para siempre”.


Como neuquina que llegó a los circuitos internacionales, Camila se convirtió en una referente para la nueva generación que se abre paso en los deportes extremos. Dijo que vive ese rol “como una responsabilidad de transmitir todo lo que he aprendido, que me encanta hacerlo, y les diría a quienes recién empiezan que van a tener que trabajar muy duro, pero, si la pasión está, van a llegar muy lejos”.


Por ahora, no siente que tenga una meta por delante sin cumplir. “Con esta experiencia del free ride, se me están abriendo puertas y mi plan es confiar en lo que estoy haciendo y ver dónde me lleva”, aclaró y observó que ya alcanzó su logro más importante: “que lo que hago me hace muy feliz”.