Dirigido por Luis Zorraquín, “Guaraní” tendrá su última función esta noche, a las 20:15, en el Espacio I.N.C.A.A. del Centro Cultural Cotesma.
Esta co-producción entre Paraguay y Argentina relata el drama de Atilio, que vive con dos de sus hijas y sus nietas a la vera del río. Atilio es paraguayo y toda su vida ha sido pescador. A sus setenta años, sus reflejos y sus fuerzas han disminuido un poco; hoy se dedica a pasar gente y pequeñas mercaderías por el río que comunica a su país con Argentina. Su gran anhelo es tener un nieto varón, un mitaí, para poder transmitirle los secretos de la pesca; el idioma y la cultura guaraní.
Para mitigar ese deseo, se hace acompañar por Iara, su nieta de once años. Ella lo ayuda en el bote y le sirve de intérprete ante los pasajeros que hablan español ya que él se niega a hablar otro idioma que el guaraní. La madre de Iara, Helena, vive en Buenos Aires, a 1100 kilómetros de distancia. Suele enviar ropa, juguetes, y también dinero para la educación de su hija. Atilio desaprueba a sus hijas, que hablan demasiado en español. Dice que a la que no le guste el Paraguay y el idioma guaraní se puede ir, como se fue Helena. Un día, Atilio, descubre una carta que Helena le envió a su hija. En ella le anuncia que está esperando un bebé. Un varón. Atilio decide ir a buscar a su hija a Buenos Aires, con la esperanza de que su nieto nazca en tierra paraguaya. Iara termina siendo acompañante involuntaria en un viaje que enfrenta a dos generaciones en busca de una nueva historia.