Por falta de recursos económicos se recortaron actividades de la Dirección de Tránsito y Transporte, una de ellas fue la de los controles de alcoholemia los fines de semana. Piden a policía y otros entes que los reemplacen.

02 Nov 2012
    

Una de las tareas que estaba rindiendo sus frutos en materia de control municipal, eran los controles de alcoholemia que se realizaban los fines de semana por parte de la dirección de tránsito y transporte del municipio. Estas acciones además se vieron  reforzadas con la llegada del radar móvil y los controles periódicos de documentación.

Durante varias semanas se pudieron conocer los resultados alarmantes que arrojaban estos controles de alcoholemia que en las madrugadas de los fines de semana se realizaban a los conductores de la localidad. Los mismos eran acciones preventivas viales para evitar accidentes de tránsito producto de la ebriedad.

Pero por falta de recursos estos controles fueron disminuyendo progresivamente, hasta casi desaparecer. Es que para que estos se puedan realizar los agentes municipales deben cobrar horas extras, y por lo que se pudo saber el ejecutivo decidió suspenderlos.

En tanto se ha solicitado la colaboración de la policía provincial y otros entes para suplir esta ausencia, pero con menor presencia con que lo hacían cuando participaba la dirección de tránsito y transporte de la comuna.

Por otro lado el funcionamiento del radar móvil, puesto en funciones semanas atrás, ha sido calificado de positivo por el director de la dependencia municipal Ricardo Herrera, quien indicó que “en los lugares que se ha colocado la gente ha aminorado la velocidad.”

“Lo bueno es que la comunidad colabora, ya que nos llaman para pedirnos el radar en distintas zonas de la ciudad, tenemos llamados de escuelas, de los callejones, puntos estratégicos, y acudimos en la medida de nuestras posibilidades.”

Asimismo el titular de la dirección de tránsito indicó que no son tantas las multas que sean realizados por esta contravención, “pensamos que poniendo el radar nos íbamos a encontrar con muchísimas faltas y lo bueno es que no es tan así.”

Finalmente Herrera comunicó que una de las mayores preocupaciones por estos días es la inminente apertura del supermercado sobre la ruta 40 a la altura de Villa Paur, donde se prevé un cambio importante en la dinámica del tránsito vehicular una vez en funcionamiento el comercio.

“Hay una proyección de lo que va a ser la ruta 40 desde Villa Paur hasta la Vega, en ese punto está previsto una rotonda. Los entes de vialidad están trabajando, ya presentaron esto hace bastante tiempo y calculo que en el inicio de la temporada tendría que estar realizado” se esperanza Ricardo Herrera.