Desde la AEHGN (Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica del Neuquén) destacamos el anuncio del Gobernador de la provincia del Neuquén, Omar Gutiérrez, de reducir la carga impositiva que golpea al sector privado y en especial al de hotelería y gastronomía por la situación en que se encuentra.
Es claro que la mejora de ingresos vía actividad hidrocarburífera permite aliviar la carga que soportan los contribuyentes. En ese sentido leemos con buenas expectativas que los servicios relacionados con la hotelería y restaurantes tendrán una baja del 50% de los importe mínimos para contribuyentes directos, a través del Régimen Simplificado de Ingresos Brutos, una prórroga del impuesto inmobiliario y acceso a líneas de financiamiento subsidiadas.
Estas medidas, se contraponen al fuerte tarifazo del servicio eléctrico en nuestra Ciudad y por el cual aún estamos a la deriva, con renuencia a recibirnos del Intendente y sin respuesta del Concejo Deliberante. Sin canales de diálogo no podremos corregir algo que hace daño a la actividad productiva impidiendo la recuperación de la actividad y el empleo.
Esta actitud es una absoluta falta de respeto a la institucionalidad de la Asociación. No merecemos tal destrato. Quizás pretendan vernos cortando una ruta para validarnos como interlocutores, como hacen otros sectores. Seguiremos insistiendo en el diálogo y consenso hasta agotar la instancia porque es la manera responsable de vivir en democracia.
La alternativa piquetera -presente nuevamente en calles, puentes y rutas- debe erradicarse del funcionamiento de la Ciudad y Provincia. Se trata de una grave anormalidad que impide el funcionamiento de la actividad privada y pública. Parece no haber sido suficiente el daño producido en el mes de abril pasado por los “autoconvocados”, que como una calesita seguimos dando vuelta sobre modalidades arcaicas que solo traen decadencia y pobreza. Defendemos a ultranza que el diálogo sin piedras es la vía para encontrar soluciones.