Daiana Ferrer, la nadadora de aguas heladas, vuelve a elegir a la Patagonia para llevar a cabo un nuevo desafío que la inspira y busca dar visibilidad a un deporte poco conocido. En esta nueva travesía, la deportista pretende cruzar los Siete Lagos, cuya temperatura no supera los 7 grados centígrados durante el invierno. Y volverá a hacerlo sin traje de neoprene, sólo con su sencilla malla, por lo que inició una campaña para recaudar fondos y costear el viaje junto al equipo que la respalda.
Daiana ya está familiarizada con las aguas patagónicas. Durante la cuarentena, la montehermoseña quedó varada en San Martín de los Andes, en la casa de una amiga, y de allí surgió la idea de cruzar el Lago Lacar a nado en pleno invierno y sólo con una malla. “El año pasado hice el Lacar sin traje de neoprene, lo que me llevó a redoblar la apuesta y mostrar que ningún sueño es demasiado grande, que ninguna aspiración es imposible y si una persona común y corriente como yo lo puede lograr, está al alcance de cualquiera que se proponga”, explicó en declaraciones con LMNeuquén.
Aunque no tenía en claro cómo se desafiaría a sí misma esta vez, estaba segura de que quería redoblar la apuesta. Por eso en ningún momento dejó de entrenar en el natatorio climatizado con bajas temperaturas de su Monte Hermoso natal. Un día, casi sin darse cuenta, descubrió cuál iba a ser su nuevo reto y entendió que la Patagonia iba a ser, otra vez, el escenario de su hazaña.

“Lo hacemos con responsabilidad, damos nuestro 100 por ciento y ponemos lo mejor de nosotros. A la vez aprendemos durante el proceso, entonces dejamos muy pocas posibilidades de fracaso”, aseguró la atleta, que planea continuar con las prácticas hasta que emprenda el viaje hacia el sur.
La nadadora puso toda su energía en el entrenamiento, para desafiarse a sí misma y visibilizar su deporte. “Los Siete Lagos son emblema de la Patagonia. Es un desafío. Para mí es un sueño, es como nadar en Antártida o en el Glaciar Perito Moreno”, aseveró.
En ese contexto, Daiana contó que la suma de los otros seis lagos que integran el sector se debe a que, tras lograr un objetivo, busca “salir de la zona de confort” e ir por algo que la ayude a crecer como deportista y persona. “De a poco vamos planteando desafíos más retadores. Hacer siete cruces, de casi un kilómetro cada uno, en pleno invierno en malla es sumamente importante. A mí me sobran ganas”, señaló.

La osada deportista planifica concluir la travesía en el Lago Lacar, lugar donde surgió por primera vez la idea de atravesar un espejo de agua patagónico en pleno invierno. “Yo me siento muy cómoda en el sur, a medida que fui ganando confianza y conociendo a la gente mostraron acompañamiento hacía lo que hago. Yo en San Martín me sentí parte de la casa. Me siento parte de la casa y me han abierto las puertas como si lo fuera”, aseguró.
Cómo será el recorrido y qué necesita para poder realizarlo
Daiana explicó que estiman poder iniciar el recorrido el 19 de agosto. El primer lago a cruzar será el Nahuel Huapi. Le seguirá el Espejo Grande, previsto para el 22 de agosto.
En el itinerario trazado, estiman cruzar el lago Villarino el 25, mientras que para el 30 cruzará el Falkner. El 4 de septiembre llegará al Lago Hermoso, le seguirá el Machónico. “Cerramos con el Lacar, ahí culmino el 10 de septiembre. La idea es nadar un lago cada tres días. Esperamos 21 días de cruce previstos. Igual tenemos presente que por el tiempo podemos sufrir algún retraso”, explicó la atleta a LMN.

El lugar de cierre de la osada travesía se debe al afecto que siempre sintió por parte de los vecinos de San Martín de los Andes y el acompañamiento que tuvo por parte de las instituciones públicas cuando se planteó cruzar el Lago Lacar por primera vez. “Me sentí muy cuidada y fue todo muy emocionante, cuando estaba a punto de llegar fue un momento súper emocionante. Se había juntado mucha gente a esperarme y todos los que estaban en el muelle me alentaron, fue hermosísimo”, expresó.
Señaló que dejaron una ventana climática ante cualquier eventualidad que pueda presentarse en el pronóstico. “Casi nos va a llevar un mes de recorrido en total. Son un poquito más de 5 kilómetros y medio los que vamos a nadar. Yo le tengo resistencia al frío, disfruto mucho lo que hago”, informó Daiana.
Además de las ganas y la condición física para poder llevarlo a cabo, Daiana necesita recaudar 600 mil pesos para pagar las lanchas y los traslados de todo el equipo. “Conmigo viajan: Jonatan Millán que rema en Standup Paddle y además es encargado de mi seguridad en el agua. Fabian "Mono" Vera, en kayak. Afuera, de mis recuperaciones se van a encargar Laura Fernández, Emilia Cortez y Guillermo Angeli. En el bote me acompaña Luis Sosa, que es entrenador, junto con Victoria Mori y en musicoterapia improvisando con la flauta va Juan Nicolás Scalise, músico local de San Martín de los Andes”, detalló la deportista.

En este sentido, adelantó que será acompañada por Prefectura Nacional, debido a que tiene que cumplir una serie de requisitos indispensables para poder ser autorizada a cruzar los lagos. “Yo me cruzaría todos los lagos, pero requiere de recursos económicos de los que, la mayoría de las veces no dispongo. Esto es para que el equipo en el que yo confío y que cuida mi vida me pueda acompañar”, explicó.
Debido a ello, inició la campaña “Un peso, un metro nadado”, para la cual abrió una cuenta bancaria para todos aquellos que quieran colaborar. El CBU 0140428303624651169298 o el alias camion.sorgo.poema. https://www.paypal.com/paypalme/cruceinvierno7lagos.
Sobre sus sensaciones ante la inminente travesía, Daiana aseguró: “A veces me tengo que pellizcar porque ni yo me creo que está tomando semejante dimensión y que se está haciendo realidad”.

Un deporte poco difundido
Pese a lo vanguardista de la actividad, Daiana es una nadadora profesional que ya ha participado en campeonatos internacionales, en los que siempre ha quedado entre los primeros puestos.
“Cuando se decretó la cuarentena yo acababa de entrar al país. Estaba volviendo de hacer los campeonatos invernales europeos y asiáticos, correspondientes a la temporada 2019-2020. Eso fue entre diciembre y marzo. Ahí estuve nadando por Alemania, Polonia, China, Austria, Holanda y Eslovenia. Tuve una buena recorrida”, recordó.
Detalló que en esos torneos, la temperatura del agua es por debajo de los cinco grados, por eso son conocidas como aguas heladas. “En el Sherman Open de Alemania quedé primera en mi primer kilómetro helado y lo nadé a 2,6 grados”, aseveró.
La deportista acuática aseguró que este es su granito de arena para que este deporte pueda cobrar visibilidad. “No somos improvisados, esto se logra después de mucho y muy responsable entrenamiento”, explicó.
¿Cómo llegó a nadar en aguas heladas?
Según contó Daiana a LMN, su amor por la natación es parte de su vida desde que tiene memoria. “Yo siempre nadé, aprendí en el mar y siempre me gustaron las aguas abiertas. Pero sentía que me faltaba algo porque a mí se me terminaba la temporada de verano en marzo, entonces tenía que esperar hasta octubre, noviembre para volver a practicar”, contó.
En la búsqueda por ampliar sus horizontes deportivos, durante septiembre de 2017 participó de un curso dictado por la Asociación de Natación y Acondicionamiento Físico (ANAF) argentina, en el cual propusieron hacer una entrada al mar sin trajes de neoprene. “Me pareció tremendo y de ahí fue que algo se despertó en mí y quise ir cada vez a más frio, más frio, más frio y empecé a adentrarme en el deporte. Ahí descubrí mi resistencia al frío”, recordó.
Por último, explicó que en este deporte lo importante no es la velocidad en que se recorren los kilómetros, sino la técnica y la resistencia al hacerlo. Por eso, cuando cruzó el Lago Lacar, estuvo una hora y seis minutos sumergida en el agua, cuya temperatura era de 9 grados. "Este año el invierno está siendo más frío, por eso la temperatura del agua es por lo menos dos grados más baja", explicó.