El hospital Ramón Carrillo comenzó sus actividades ayer con un paro de su personal con dispar acatamiento, dependiendo del sector, según lo dispusiera el gremio ATE en un plenario de delegados el día lunes y que tendrá su continuidad el miércoles próximo.
El reclamo consiste en un aumento salarial del 35%, el pase a planta permanente de personal en negro, la recategorización de 30 enfermeros/as que trabajan en hospitales de la provincia y el por el no vaciamiento de la obra social del Instituto de Seguridad Social del Neuquén.
“En el hospital de San Martín de los Andes hay varios trabajadores que están con un régimen de trabajo distinto al de la gran mayoría, personas que contrata la subsecretaría de Salud para cubrir a todos los faltantes que hay en los hospitales”, explicó Julio Argel, delegado local de ATE Salud.
El dirigente gremial denunció que en la localidad existe un faltante de 15 enfermeros y que en el sector mantenimiento tanto del nosocomio local como de los siete centros de salud cuenta con tan solo 4 personas.
El reclamo salarial – expresado por Argel – refiere a que el ejecutivo provincial ofreció para el mes de julio un aumento del 9%, entendiendo que un buen número de los trabajadores cuenta con un básico de $1850.
En tanto en el día de ayer se atendieron únicamente urgencias, pacientes derivados de otras localidades y las cirugías programadas, pero se prevé que para el paro previsto para el miércoles el cese de actividades será total, salvo las emergencias.
“Nosotros deseamos que el ejecutivo nos llame y haga una nueva propuesta, no queremos estar de paro”, concluyó Argel.