Una turista olvidó en un local del centro de la ciudad el estuche de sus lentes, en el que guardaba el dinero. Desesperada, regresó minutos después en busca de sus pertenencias

15 Ene 2011
    

Una turista que visita esta localidad pudo recuperar un estuche de anteojos que se había olvidado en un local comercial, en el que tenía guardados 10 mil dólares en efectivo.
El hecho ocurrió el viernes por la noche en un locutorio y drugstore ubicado sobre avenida San Martín frente al centro cívico.
Gabriel Benyik, propietario del comercio, comentó a este medio que “la mujer había concurrido por la tarde y al retirarse se le quedó un estuche color azul donde se guardan los anteojos. Minutos más tarde lo encontramos y lo colocamos en una caja donde precisamente ponemos los objetos que se olvidan los clientes”.
“Como a las 22 horas cuando se cortó la luz en la ciudad y estábamos con los empleados, llegó esta señora desesperada preguntando si no habíamos encontrado el estuche. Le dijimos que sí y se lo entregamos inmediatamente. Casi se desmaya de la emoción, pues nos dijo que allí tenía guardados 10 mil dólares”, explicó.
Benyik recordó que “la mujer comprobó que estaba todo el dinero allí, y nos quiso dar un recompensa pero no se la aceptamos, porque creemos que no corresponde ya que en definitiva recuperó lo que es suyo”.
 
Ejemplo
El empresario es propietario de PST, que es un locutorio con servicios de Internet, venta de artesanías y drugstore situado sobre la avenida San Martín frente a las oficinas de la Secretaría de Turismo de la Municipalidad.
Comentó que cada vez que alguien se deja olvidado algún objeto personal, además de guardarlo en una caja, se pone en contacto con las radios para que informen del extravío; o si hay alguna documentación con un teléfono se ponen en contacto inmediatamente con el propietario.
“Nunca nos pasó que se encontrara un estuche con una suma tan grande en dólares, pero sí hubo veces que han dejado billeteras con dinero que se las hemos devuelto a sus dueños tal como se las olvidaron. Así es como debe ser porque hay que ponerse en el lugar de la persona que le pasa este tipo de cosas”, remarcó