Este día fue instaurado por la Conferencia Mundial de la Coalición Contra el Tráfico de Personas en coordinación con la Conferencia de Mujeres en Dhaka, Bangladesh en enero de 1999.

23 Sep 2015
    

Desde la organización Juana Azurduy de San Martín de los Andes, hoy más que nunca, se envió un comunicado de prensa en el que piden reflexionar sobre lo que ocurre en la provincia de Neuquén.

“Necesitamos una política firme de aplicación de la Ley 26.842 de Prevención y Sanción de la Trata de Personas y Asistencia a sus Víctimas; ya que esta nueva forma de esclavitud moderna que mediante el engaño o secuestro somete a mujeres, niñas y niños a ejercer a la prostitución  es un delito que da cuenta de la industria del sexo que pone a las  mujeres como mercancía y no como sujeto”, expresaron.

“Estamos convencidos que no  es posible avanzar contra la trata de personas  sin la  firme decisión  de un  trabajo conjunto por parte del  poder judicial, el poder político y la policía. La falta de compromiso en la erradicación de estas formas extremas de degradación sugiere complicidad por parte de los poderes mencionados”, agregaron.

Hasta el momento la falta de presupuesto para la aplicación de las leyes es un claro gesto de la poca importancia por parte del ejecutivo en dar curso a las leyes ya sancionadas. No hay dudas que en tanto no vayan acompañadas de su aplicación, las leyes son sólo letras impresas en papel. Por lo que reflexionamos que en cada presupuesto nacional, provincial o municipal debe existir el recurso económico destinado a la lucha contra la  trata de personas con fines de explotación sexual.

El problema de la trata es efectivamente un tema de la región que sin duda acompañará el crecimiento del boom petrolero en la provincia.

En San Martin de los Andes la Organización Juana Azurduy logró a través de una Ordenanza la clausura de los cabarets y la prohibición de la solicitud de nuevas licencias para abrir este tipo de locales.  También por ordenanza se logró la eliminación de la libreta C (solo utilizada por las mujeres que ejercían la prostitución)  y se avanzó en la realización de talleres de temáticas de género en todos los niveles de establecimientos educativos.

Estamos convencidos que sólo tomando conciencia y obrando en consecuencia, la sociedad civil podrá erradicar  la aberrante situación de la que son víctimas -cada año- miles de mujeres niñas y niños en todo el mundo.