El lonco de la comunidad mapuche Curruhuinca Ariel Epulef confirmó la recepción de una propuesta por parte del gobierno provincial, por la compensación de tierras en la tercera reserva fiscal a cambio de la porción del lote 69 A que venían reclamando.

06 Ago 2013
    

“El viernes por a la tarde llegó un fax donde se acuerdan algunas pautas con el fiscal de estado Raúl Gaitán, que nos da las garantías para poder decir que salimos de un conflicto y más tarde lo aceptó la asamblea de la comunidad en Payla Menuco; ahora falta la formalidad que supongo que esta semana se va a dar”, aseguró Epulef.

La propuesta enviada por el fiscal de estado Gaitán es por la compensación de 150 hectáreas en la tercera reserva fiscal, espacio que se encuentra en el cerro Chapelco fuera del centro invernal y el compromiso por parte del gobierno provincial y municipal para las gestiones ante Parques Nacionales para que la zona denominada Ruca Ñire puedan ser de uso de la comunidad, “como parte de la compensación de las tierras que se ceden en Chapelco y para salir del conflicto de Newen Antú (tierras donde se emplaza el ex hotel Sol de los Andes)”.

Si bien aún es incipiente es acuerdo, en principio Epulef indica que el uso primario que tendrán estas tierras es para pastoreo de los animales de los parajes cercanos como Pil Pil, Payla Menuco, Newen Antú, pero dejó entrever que existen proyectos orientados al desarrollo de productos turísticos y hoteleros, dado la cercanía con el complejo invernal Chapelco.

Por otro lado Epulef indicó “que en las asambleas está siendo bien visto la posibilidad de que se autorice el asfalto (de la ruta provincial 19 de acceso al cerro Chapelco), siempre y cuando sea a cambio de una compensación”, que se deberá arreglar con vialidad provincial que ya entregó el proyecto formal a la comunidad originaria.

Otra negociación en danza es con el municipio por el territorio de Newen Antú (ex hotel Sol); donde el compromiso de la comuna es la cesión de 250 mts2 en el centro de estudios Sol de los Andes para actividades educativas de la comunidad y las ya mencionadas gestiones ante Parques Nacionales por el uso de las tierras en Ruca Ñire.

En principio estos avances destraban los conflictos planteados por la comunidad Curruhuinca, relegando por el momento la posibilidad de medidas de acción directa en la base del cerro y acercando una posible definición certera a reclamos de antaño con este comunidad del pueblo originario.