A partir de la homologación, en el Concejo Deliberante, del Convenio entre Nación y Provincia se comenzará a ejecutar la construcción de 56 viviendas para el barrio intercultural en el Lote 27. Con un aporte de $18 millones, en un plazo de 10 meses.

02 Ene 2014
    

En poco tiempo más se pondrá en marcha la ejecución de las primeras 56 viviendas del barrio intercultural, de un total de 250 a construirse en el Lote 27. Cuentan con un aporte de $18 millones, provenientes del Ministerio de Desarrollo Territorial y tienen un plazo de entrega de 10 meses.

 

“En Nación hay entusiasmo con un proyecto tan innovador como el barrio intercultural del Lote 27.  Un planteo innovador de un barrio intercultural, el primero en la Argentina y medio ambientalmente sustentable. Por eso el compromiso de Nación es financiar las 250 viviendas y se empezó con estas primeras 56”, explicó Martín Rodríguez, director del Instituto de Vivienda.

De la construcción de las mismas participarán cooperativas de trabajo, entre las que se encuentra la de Asociación Vecinos Sin Techo y la de la Comunidad Curruhuinca, “porque van a ser los protagonistas de la construcción de sus propias viviendas”, agregó el funcionario.

Asimismo indicó que se estudia la posibilidad de incorporar otras entidades de trabajo para agilizar los tiempos de construcción, dado que el plazo de entrega de las viviendas es de 10 meses y a pesar de la veda climática.

Por su parte Rodríguez advirtió que “Nos preocupa el plazo, tenemos 10 meses para construirlas, una vez que llegue la primera cuota del financiamiento y en el medio la veda climática, por lo que la posibilidad es evaluar en la mesa política, la incorporación de más capacidad de trabajo, más cooperativas”.

Para las viviendas existen 3 prototipos distintos de construcción, una vivienda en construcción natural con tecnología en adobe, una construcción tradicional en dúplex y otra tradicional en una planta, con un costo promedio de $320.000.

En tanto el funcionario destacó los pasos que viene dando el proyecto del Barrio Intercultural a lo largo de los nueve años que se viene gestando, principalmente impulsado por la organización Vecinos Sin Techo, desde la restitución de las tierras al pueblo mapuche, la ley nacional que lo avala, las tierras y en poco tiempo la construcción de las primeras viviendas.