El viernes por la tarde, en el barrio Lonquimey de Junín de los Andes, cinco viviendas de madera fueron consumidas por el fuego, por causas que aún se intentan establecer.
Las llamas ganaron rápidamente las casillas, construidas mayormente en madera, y fue imposible dominarlas, pese a la lucha presentada por cuatro autobombas, dos cisternas del Municipio de la vecina localidad y el aporte de camiones de empresas privadas.
Afortunadamente, considerando que el siniestro demoró varias horas en ser extinguido, no se lamentaron heridos ni víctimas fatales, aunque cuatro socorristas debieron ser asistidos por el intenso calor del fuego, sufriendo algunos de ellos, quemaduras de primer grado.
La comunidad también colaboró con el operativo aportando baldes de agua y mangueras, que fueron de gran utilidad para el combate del incendio.