A la luz de los sucesos públicos que afectan a la comarca andina, quiero expresar mi más profunda preocupación con la actitud evasiva e irresponsable del Gobierno Nacional.
Los ataques y amenazas contra la integridad física y la propiedad por parte de grupos radicalizados dinamitan la convivencia pacífica y democrática.
El Presidente de la Nación no puede desentenderse de sus responsabilidades y obligaciones, ni tampoco abandonar a los ciudadanos/as patagónicos ante la peligrosa escalada de violencia que estremece a la región. El Estado federal es el garante último del orden público nacional.
Escudarse en una equivocada interpretación del federalismo y de la legislación vigente no es más que una excusa pueril que revela una conducta mezquina y especulativa por parte de las autoridades nacionales.
Finalmente, quiero manifestar mi apoyo y solidaridad a la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, en esta difícil situación.
Me pongo a disposición para articular desde el Senado de la Nación las acciones necesarias para contribuir a una rápida solución del conflicto.
Lucila Crexell
Senadora Nacional